Desde el minuto cero puedes comenzar esta labor de evaluación en la selección de perfil creativo, pues indagar en su personalidad va a darte pistas. Ahora bien, el proceso debe tender a la objetividad, así que establece ciertos indicadores que te eviten sucumbir al encanto. El pensamiento divergente es un activo para la productividad siempre que complete otras habilidades. Aquí vas a encontrar los rasgos de distintos perfiles creativos y algunos test para medirlos.
Evaluando perfiles creativos
Evaluar los perfiles creativos sigue siendo un desafío. Para situar el concepto, lo puedes separar en tres dimensiones. Dirás de un perfil que es creativo cuando cumpla estos tres rasgos:
- Conocimiento sobre los problemas o retos.
- Imaginación para ver y crear soluciones que no existen previamente.
- Evaluación de la situación anterior, de la demanda del público objetivo y de los resultados posteriores.
Estas son las consideradas superskills de las personas que aportan valor y que no van a ser desplazadas por las IA o los robots, lo cual es un reto actual en la generación de empleo. En concreto, para una fase de innovación se suele aplicar el perfil Basadur, es decir, un test de personalidad que clasifica los perfiles creativos necesarios en cuatro categorías:
- Generador: para la fase 1, donde se gestan las oportunidades y las necesidades.
- Conceptualizador: para la fase 2, donde se desarrollan nuevas ideas.
- Optimizador: para la fase 3, donde se saca partido a las propuestas.
- Implementador: para la fase 4, cuando se llevan a la práctica y se validan las soluciones.
Pruebas con indicadores de creatividad
Desde 1966, se ha ido desarrollando lo planteado por Torrance en su Torrance Test of Creative Thinking (TTCT). En esta línea, una de las pruebas recurrentes desde la edad escolar es la PIC, es decir, Prueba de Imaginación Creativa. En la PIC-A, o sea, dirigida a personas adultas, se estiman los factores del pensamiento divergente: fluidez de ideas, flexibilidad del pensamiento, originalidad de las respuestas y elaboración.
En España, se reconocen otros test como el TAEC (Test de Abreacción para la Evaluación de la Creatividad) o el CREA (Test de Inteligencia Creativa). La cuestión es cómo medir esa creatividad e innovación para que la selección sea lo más objetiva posible. Esta es una investigación que también persiguen desde la academia. Algunas de las pruebas ya testadas que puedes aplicar son las siguientes:
- Dibujos alternativos y comparables. Por ejemplo, “un plato y una manzana”. La mayoría de los perfiles imita el imaginario y dibuja un plato esquemático y la típica manzana entera encima. Pero ya tienes una primera selección entre los que dibujen la manzana comida o incluso solo el plato, argumentando que la manzana ya se la comió la persona que estaba detrás del plato.
- La figura incompleta: proponer completar un dibujo presentando solo un par de trazos.
- Acertijos: miden la capacidad imaginativa para llegar a una única respuesta correcta mediante el razonamiento verbal.
- Asociaciones remotas: cada palabra cuenta con tres significados posibles y hay que encontrar uno más que relacione los 30 ítems. Se puntúa el número de respuestas correctas en un máximo de 30 minutos.