Cumplir a rajatabla la integración laboral de las personas con discapacidad es primordial para cualquier empresa. De hecho, por ley, cada empresa debe tener al menos un 2 % de su plantilla compuesta por discapacitados si tiene más de 50 trabajadores. Por desgracia, muy pocas compañías lo cumplen.
Actualmente, las personas con discapacidad están sumamente desfavorecidas en el terreno laboral y esto se debe, en gran medida, a los prejuicios que todavía existen en las empresas acerca de su rendimiento o capacidad.
El 81 % de las empresas de España no cumplen con la Ley de Inserción Laboral de Personas con Discapacidad (LISMI), pese a que el Estado ofrece ayudas y ventajas económicas importantes a las empresas que deciden incluir en su plantilla a personas con discapacidad.
Este colectivo presenta una tasa de desempleo del 32,2 %, ocho puntos por encima de la tasa de paro general. Además, de este porcentaje más del 60 % son parados de larga duración, lo que acrecienta aún más la mala situación de estas personas.
Medidas para la integración laboral de personas con discapacidad
El primer paso para mejorar esta situación es que las empresas actúen y trabajen en la inserción laboral como deben. Cumplir la ley de integración laboral es vital pero, para ello, primero hay que tomar una serie de medidas que permitan a estos trabajadores estar cómodos en su trabajo.
La primera medida que ha de tomar el departamento de recursos humanos es la concienciación y sensibilización de la plantilla acerca de la inserción laboral. Fomentar el respeto y la cooperación es fundamental.
En segundo lugar, las instalaciones de la empresa han de ser accesibles, de modo que es imprescindible que se eliminen barreras arquitectónicas como las escaleras. La adaptación de los puestos de trabajo y aseos para las necesidades de estas personas también resulta primordial. Se debe fomentar, además, el compromiso de la dirección y el diálogo con entidades representativas que se ocupen de los derechos de las personas con capacidades diferentes.
Por último, debemos destacar que es esencial abrir los canales internos de comunicación entre empleados y departamentos. Por supuesto, tampoco pueden dejarse atrás los canales de comunicación externos, de modo que las persona con discapacidades deben tener plena libertad para hablar con clientes, proveedores y colaboradores ajenos a la compañía.
Mejora tu imagen y apoya a un colectivo
En contra de lo que piensan muchos empresarios, tener en plantilla a personas con discapacidad ofrece una muy buena imagen. Los clientes se quedarán con la impresión de que la empresa está comprometida con este colectivo y la verán como una compañía inclusiva y alejada de prejuicios, tal es el caso de empresas como Repsol u otras entre las que destacan Accenture, Adecco, AXA o Carrefour.
Además, todas las reformas y adaptaciones que sean necesarias serán subvencionadas por el Estado. Asimismo, la contratación de personas con discapacidad también va acompañada de ayudas y beneficios económicos y fiscales.
En caso de que, como las grandes compañías españolas, quieras crear un entorno inclusivo e igualitario en tu empresa, comienza por buscar buenos trabajadores y ten claro que la discapacidad no es, en ningún caso, un obstáculo para desempeñar un trabajo excelente. Anímate a publicar tu primera oferta de empleo gratis en Infoempleo y mejora la integración laboral de las personas con discapacidad en tu compañía.