En la actualidad, existen muchas estrategias concretas para la mejora de la salud laboral de los trabajadores y que, a su vez, potencian el nivel de productividad laboral. Una de ellas tiene que ver con la conciliación familiar y el equilibrio vida-trabajo. En este artículo, hablaremos de políticas flexibles, turnos rotativos y conciliación, y de cómo se puede realizar una correcta planificación de turnos para ofrecer más flexibilidad laboral a nuestros empleados.
Turnos rotativos y conciliación: cómo gestionarlo desde RRHH
Cuando un empleado tiene dificultades para conciliar, su estabilidad emocional puede verse afectada. Este hecho, también generará dificultades a nivel laboral y es muy probable que surjan episodios de estrés laboral y que su rendimiento se vea afectado.
Ante estas situaciones, la empresa debe ofrecer soluciones que contribuyan a la satisfacción del empleado y al clima laboral, y que, por consiguiente, no mermen la capacidad productiva del trabajador.
Una correcta y eficiente gestión de horarios llevada a cabo desde RRHH, puede contribuir a paliar algunos de estos problemas. Medidas como la que el personal rote turnos pueden ser una solución inicial, aunque en algunos casos, también podrían ocasionar mayores niveles rigidez para conciliar, ya que existirán franjas horarias de trabajo totalmente incompatibles con las necesidades familiares concretas.
La solución más coherente pasa por establecer una adaptación de jornada de forma individual. Sin embargo, esta medida, recogida en el art. 34 del Estatuto de los Trabajadores, tiene sus limitaciones. Las principales son las siguientes:
- No es un derecho absoluto: ya que, aunque el trabajador tiene derecho a solicitar, no puede exigirlo, y deberá negociar su formato con la empresa durante un período de 5 días.
- Deben tenerse en cuenta los Convenios Colectivos: si así está establecido dicho procedimiento en los mismos.
- Se solicitará en los siguientes supuestos:
- Cuidado de hijos menores de 12 años, y de mayores de 12 años si necesitan un cuidado directo.
- Cuidado del cónyuge o de familiares hasta el segundo grado de consanguineidad.
- Cuidado de otras personas dependientes que convivan en el mismo domicilio.
Otros límites legales en la adaptación de la jornada laboral
Como vemos, este derecho no es absoluto y a la hora de establecer una solución de este tipo, es importante recordar que existen limitaciones, tanto para la empresa como para el trabajador que lo solicita.
Además de los anteriores requisitos, el nuevo horario debe ser realmente posible, pues habrá de tener en cuenta los tiempos de producción en los que opera la empresa, así como el horario del resto de compañeros. Por otro lado, también influirá el puesto que ocupa el trabajador que lo solicita, sus funciones y responsabilidades para poder concretar la adaptación.
No obstante, también la empresa tiene sus limitaciones en este sentido, ya que no puede negarse unilateralmente. Deberá negociar con el empleado, y en el caso de denegar la solicitud, presentar una fundamentada justificación sobre las causas de su negativa para defenderla ante una posible demanda judicial.
Ya sea con la adopción de turnos rotativos, con una reducción de jornada o con una adaptación, la empresa y el departamento de RRHH debe tratar de equilibrar sus necesidades con las de sus empleados, con el objetivo de no ver dañada su capacidad productiva, su imagen y su clima organizacional. En definitiva, para cuidar su salud y la de sus empleados.