Si en tu empresa la política de contratación está muy centrada en el outsourcing o externalización de servicios, en este artículo te contaremos algunas fórmulas atractivas que puedes incluir en tus ofertas de empleo para trabajadores autónomos o freelance. Aspectos como la durabilidad del proyecto o cierta libertad de acción y de toma de decisiones en la operativa diaria, aportarán un valor añadido incuestionable a la oferta que lances a este colectivo.
Elementos clave en las ofertas de empleo para trabajadores freelance
Antes de adentrarnos en la cuestión de las ofertas de empleo destinadas a los trabajadores independientes o autónomos freelance, debemos tener claras cuáles son las características de este tipo de perfiles profesionales.
Ser autónomo, ser freelance, por encima de cualquier otra característica, es ser un empresario individual. Y como cualquier empresario, este se define por trabajar de forma libre, eligiendo sus propios clientes, los honorarios que solicita por sus servicios, así como el horario de trabajo y los medios de producción que pone en juego, entre otras cuestiones.
Bien, pues sobre estas características debería gravitar una oferta de empleo atractiva que queramos destinar a un autónomo. Y algunos de los elementos que no deberían pasarse por alto son los siguientes:
- Proyecto de colaboración a medio-largo plazo. Al igual que ocurre con las ofertas para los trabajadores por cuenta ajena, la duración del contrato (en este caso, del proyecto o de la colaboración), es un elemento clave. Dado que es complicado para un autónomo mantener unos ingresos estables de forma continuada, si podemos ofrecerle la posibilidad de un servicio estable y duradero, esto nos servirá para llamar su atención.
- Fórmulas de pago y honorarios pactados. Tener la posibilidad de negociar es importante para este tipo de profesionales pues, en función del tipo de servicio que necesite la empresa y la duración de este, podrán acomodar sus emolumentos a las necesidades de la empresa, y viceversa.
- Independencia horaria. Ya que el autónomo tiene como objetivo ofrecer sus servicios a otros clientes. Tener la posibilidad de dirigir el tiempo dedicado a cada uno de ellos resultará esencial para hacer rentable su proyecto empresarial.
El riesgo de contratar a un falso autónomo
Existen, además de estas, otras características de las ofertas a autónomos que también pueden resultar atractivas. Servicios de gestión empresarial gratuita o materiales y herramientas a su disposición son algunas de ellas. Todo dependerá del tipo de servicio que necesitemos como empresa, de la importancia de este y del riesgo que se quiera asumir, o de la vinculación que queramos tener con el freelance.
Y en este sentido, existe la figura del trabajador autónomo económicamente dependiente (TRADE). Para convertirse en este tipo de autónomo, cuyas características están reguladas por ley, debe facturar más del 75% de sus ventas a un solo cliente. A una sola empresa. Trabajar como freelance es complicado y el mercado está lleno de incertidumbres. Por ello, muchos empresarios autónomos ven con buenos ojos asegurar un cliente de estas características. De ahí la importancia del tipo de vinculación y el volumen de negocio que se pueda llegar a asegurar en la oferta.
Sin embargo, la figura del TRADE es controvertida y, en muchas ocasiones, estamos ante un caso de falso autónomo. Es decir, un trabajador que cotiza en el Régimen Especial del Trabajador Autónomo (RETA) pero que, a diferencia de lo que explicábamos anteriormente, depende totalmente de la empresa en cuanto a los honorarios a percibir, el horario a realizar y los medios de producción que se utilizan, entre otros aspectos. Se asimila, por lo tanto, a un trabajador por cuenta ajena pero que cotiza como autónomo y también tributa de forma independiente.
Esta situación, contemplada en la legislación como fraude de ley, viene acompañada de importantes sanciones para la empresa que encumbre por encubrir una contratación. Por tanto, nuestra oferta debería resolver claramente la cuestión de la independencia del freelance.