En España, el «presentismo» se ha hecho fuerte y los trabajadores se resisten a abandonar sus puestos de trabajo a su hora o, por lo menos, antes de que lo hagan sus superiores. Según una reciente encuesta de la empresa de trabajo temporal Randstad, el 45,8% de los entrevistados reconoce que sus compañeros se quedan más tiempo en el trabajo por miedo a perder su empleo, sin que eso conlleve necesariamente una mayor productividad.
La encuesta, realizada entre más de 1.000 españoles, pone de manifiesto el perfil del «presentista». Es un hombre menor de 25 años, con estudios básicos y de origen español. Casualmente, este perfil coincide también con el de las personas que más han reducido su absentismo injustificado. Desde la compañía holandesa se insiste en que el «presentismo» no repercute positivamente en el mercado laboral, recordando que, precisamente, uno de los principales problemas del empleo español es la baja productividad.
Randstad advierte de que tan pronto como mejore la situación económica, los trabajadores volverán a su tónica habitual porque valoran mucho la conciliación de la vida laboral y familiar. Para Ignacio Buqueras y Bach, presidente de la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios, «todos debemos contribuir al cambio: los dirigentes empresariales, evolucionando hacia una dirección por objetivos; los trabajadores, siendo más responsables y comprometidos; y los ciudadanos, presionando para que se organice mejor el trabajo en las empresas y en la Administración. No sirve ‘calentar la silla’; hay que trabajar bien», sentencia Buqueras.
Está de acuerdo José Vía, secretario de Acción Sindical de USO. «El ‘presentismo’ es una cultura muy arraigada en España y es tarea de toda la sociedad cambiarla, para lo cual se debe iniciar un cambio educativo desde los niveles básicos que llegue a los mandatarios, políticos y empresarios, para que den ejemplo».
David Alva, presidente de la Confederación Española de Jóvenes Empresarios (CEAJE) introduce los nuevos medios en el debate: «En Estados Unidos alargar tu jornada laboral es un indicador de que no realizas correctamente tu trabajo y por ello tienes que quedarte más horas en tu puesto. Es necesario un cambio de mentalidad y mayor desarrollo y presencia de las nuevas tecnologías en las empresas». Para Alva, «un horario racional es aquel que permita la conciliación laboral y familiar; que suponga el desarrollo efectivo a nivel personal y profesional, sin menoscabo de la productividad empresarial».
El secretario de Acción Sindical de USO puntualiza: «El horario racional contempla tres puntos: el trabajo remunerado, el tiempo para la familia, y el trabajo no remunerado y el tiempo para el ocio». El presidente de la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles apuesta por un horario racional, «siempre que la actividad de cada sector lo permita»: «De lunes a jueves la jornada laboral se iniciará entre las 7,30 y las 9,00 horas y finalizará entre las 16,30 y las 18,00, con un máximo de 60 minutos para almorzar. El viernes se terminará entre las 14,00 y las 15,00 horas, quedando la tarde libre. Todo ello en un contexto de flexibilidad y libertad de horarios, como corresponde a un país moderno y democrático».