¿Qué es un becario?

La figura del becario, o trainee, probablemente ya la habrás integrado en la estructura de tu empresa, pero ¿conoces todo lo que puede aportar? Estas personas se caracterizan por ser estudiantes o recién graduados con poca o ninguna experiencia laboral que buscan impulsar su carrera profesional a través de una oportunidad que les permita aprender y aplicar sus conocimientos teóricos adquiridos a través de sus estudios.

En la gran mayoría de los casos, los becarios son personas jóvenes, sin prejuicios sobre una posición de trabajo y con una elevada motivación para introducirse en el mercado laboral. Mediante un acuerdo con la universidad, el objetivo principal es ayudar a los jóvenes estudiantes a empezar a desarrollar su carrera profesional facilitando su integración en sus primeros puestos de trabajo.

Ventajas de contar con un becario en tu equipo y en tu empresa

Un becario, por definición, llega al mercado laboral para aprender, pero más allá de la formación que busca adquirir en tu empresa, puede aportar mucho. Algunos de los beneficios principales podrían destacarse entre los siguientes:

Retribución económica

Con la finalidad de proporcionarles una ventaja competitiva, el convenio de becario permite a la empresa ofrecer una compensación económica reducida o nula para que la inversión de tiempo, esfuerzo y dinero realizado por tu empresa en su formación no sea desproporcional a las tareas que podrá realizar.

Ideas innovadoras

A diferencia de una persona que lleva años en el sector, las mentes frescas recién extraídas de las aulas pueden aportar información novedosa que puede beneficiar a todo tu equipo. Desde herramientas nuevas, a teoría ya olvidada por los demás e incluyendo su pasado limpio de rutina y monotonía, los becarios llegan con una visión mucho más abierta, permitiendo así ampliar las fronteras de las ideas nuevas en todos los proyectos.

Estudiante en prácticas en la empresa

Formación bidireccional

Es evidente que el becario te busca para tener la oportunidad de aprender, de empaparse con una experiencia real y para crecer como profesional, pero su carencia de una experiencia real y proximidad con su formación que justo acaba de cursar, o que todavía está cursando, pueden presentarse como oportunidades a tus empleados para formarse también, conociendo nuevas metodologías, nuevas TIC aplicadas a tu sector y mucho más. También ellos pueden enseñar a los empleados actuales de la empresa a través del reverse mentoring.

Motivación y energía para el clima empresarial

Introducir una persona con ganas de trabajar, con una motivación clara para hacer lo mejor posible y unos ánimos elevados por estar encarrilando su vida puede tener una clara repercusión en el ambiente. Su vitalidad y su interacción con los demás integrantes del equipo puede ayudar a levantar ánimos y, como consecuencia, mejorar la motivación a nivel global.

Profesionales moldeables

Su falta de experiencia implica también una ausencia de especialización, implicando la posibilidad de, o bien, abarcar tareas muy diferentes, o bien tomar la iniciativa de especializarse en algún ámbito que puede ser de interés tanto para el individuo como para tu empresa.

¿Es una buena idea integrar los becarios en tu estructura empresarial?

Como suele ser el caso, tomar una decisión positiva para tu empresa dependerá de muchos factores. Sin embargo, incluir la figura del becario a menudo es un paso positivo, independientemente del sector. Como empresa, siempre debes tener presente que se trata de un perfil al que no podemos exigir lo mismo que a otro con más experiencia.

No obstante, integrar un trainee como aprendiz también te da la oportunidad de formar a esta persona durante un tiempo suficiente como para que más adelante, si se cree oportuno, pueda formar parte de tu equipo de trabajo, conociendo ya el funcionamiento de tu empresa, la metodología de trabajo y ahorrando el periodo de adaptación que requeriría un nuevo empleado. Y, en caso contrario, su periodo en la empresa habrá servido para generar una situación win-win en el que tanto la empresa como el becario se llevan la experiencia y el conocimiento compartido durante este tiempo.

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