Aunque puede que el síndrome de alta exposición no te resulte conocido, seguro que alguna vez has sufrido o visualizado sus efectos. Este fenómeno puede afectar a aquellos trabajadores sobresalientes que destaquen en las organizaciones, y sus consecuencias hacen que estas figuras excepcionales vean aplacado su talento a causa de la hostilidad y, en algunos casos, de la envidia que despierta entre sus compañeros o superiores. Para poder combatir esta realidad laboral, las siguientes 3 claves te serán de gran utilidad. ¡Empezamos!
¿En qué consiste el síndrome de alta exposición?
Durante las diferentes etapas de la vida (el colegio, la universidad, el mundo laboral), de seguro te has cruzado con personas excepcionales que destacaban sin esfuerzo en algún campo. Si este era tu propio caso, sabrás que descartar, en ocasiones, puede resultar más un calvario que una bendición si el entorno no es el adecuado.
El síndrome de alta exposición hace referencia a esta realidad, en la que las personas que sobresalen por encima del resto son las más fáciles de distinguir y, por tanto, de sesgar. Como si se tratara de un campo de trigo, aquellos que destacan, en ocasiones se ven obligados de forma forzosa a minimizar su talento o logros para encajar en el baremo del resto.
Una exposición prolongada a esta clase de entornos hace que estas personas puedan obligarse a sí mismas a mantener un perfil bajo o incluso a verse entorpecidos por los demás. Por eso, detectar y tratar a tiempo este síndrome es un punto obligado para potenciar el talento de los empleados.
¿Cómo combatir el síndrome de alta exposición en las empresas?
Detectar esta realidad puede ser todo un reto. Sobre todo si los propios superiores se encargan de minimizar las aportaciones de la persona afectada. Por eso, unas medidas preventivas adecuadas pueden ser clave para desterrar la concepción de que el clavo que más sobresale debe ser el primero en llevarse un martillazo.
Apuesta por la diversidad
En la actualidad, las estrategias DEI son una manera efectiva de contar con perfiles variados que destaquen en distintos campos. Potenciar la diversidad en la empresa hace que empoderar a la plantilla resulte mucho más fácil, puesto que la riqueza de perspectivas y funcionalidades crea un ambiente basado en el respeto.
De esta manera se consigue integrar diversos talentos y distintas formas de pensar. Factores esenciales para reducir la tendencia a castigar a aquellos que sobresalen.
Instaura planes de reconocimiento laboral
Los planes de reconocimiento laboral son otra gran estrategia para mitigar los efectos del síndrome de alta exposición. Al ser una medida incluida dentro de las políticas generales de la empresa, se logra visibilizar los logros a título individual y como equipo. Lo que beneficia a ambos niveles:
- Individualmente: gracias al reconocimiento de logros individuales se puede observar de manera más sencilla aquellos perfiles que destacan en áreas concretas. Así, reconocer y premiar el talento resulta una tarea mucho más asequible.
- Grupalmente: los equipos se verán motivados y la penalización grupal frente al perfil que destaca se mitigará.
Potencia la cohesión del equipo
Por supuesto, algo que no debes olvidar es que en un ambiente laboral positivo, las envidias serán vistas como una actitud innecesaria. Esto se consigue trabajando constantemente en el sentimiento de pertenencia de los equipos y potenciando aquellas actividades en las que puedan estrechar lazos.
Los sistemas de comunicación interna también son esenciales para conseguir buenos equipos. Y, por supuesto, los eventos de teambuilding y las medidas de afterwork serán grandes herramientas con las que conseguirlo.