Es obvio que encontrar la temperatura ideal en la oficina es importante para la productividad de los trabajadores. Y es que una diferencia de sólo unos pocos grados puede tener un impacto significativo en el grado de concentración y compromiso de los empleados.

Es curioso porque, durante muchos años, las investigaciones apuntaban a que mantener la temperatura de la oficina entre 21 y 23 grados era lo mejor para la mayoría de los trabajadores. 

El problema es que dicha investigación resulta completamente obsoleta actualmente, ya que los datos que proporcionaba se basaban en una oficina compuesta principalmente de empleados varones, que era lo más común en los lugares de trabajo hasta la segunda mitad del siglo XX. 

Sin embargo, ahora en los edificios de oficinas trabajan tantas mujeres como hombres que tienen claro en qué tipo de empresa quieren trabajar. Entonces, ¿debería tenerse en cuenta esa circunstancia en las decisiones sobre la temperatura de las oficinas?

La temperatura de la oficina y las mujeres

Según un estudio, la diferente química corporal de las mujeres debe ser considerada cuando se ajusta la temperatura la oficina, especialmente en los meses de verano cuando el aire acondicionado funciona todo el día. 

Las mujeres tienen tasas metabólicas más bajas que los hombres y tienden a tener más grasa corporal. Esto significa que las mujeres tenderán a ser más susceptibles al frío que los hombres. Por lo tanto, si hay muchas mujeres en tu oficina, es posible que sea necesario ajustar la temperatura.

Aunque la investigación puede recomendar 21 grados como la temperatura mínima aceptable, los responsables de mantenimiento de las oficinas deben considerar no sólo cuántas mujeres hay en la oficina, sino también cómo está diseñado el edificio

Las grandes ventanas que dejan entrar mucha luz solar pueden hacer que una habitación se sienta más cálida. Los techos altos pueden crear una mala distribución del aire, lo que significa que los radiadores, o los aparatos de aire acondicionado tienen que trabajar más. 

HRTrends-como-afecta-la-temperatura-de-oficina-a-productividad

Cómo afecta la temperatura de la oficina a la productividad

A medida que la temperatura aumenta, la productividad disminuye. Lo mismo ocurre cuando la temperatura disminuye de los niveles de confort de cada individuo.

Existen determinados factores que afectan a la percepción de la temperatura de cada individuo, y que hace que varíen los niveles de confort entre unos y otros:

  • El peso de una persona, específicamente el índice de masa corporal o IMC, puede afectar la forma en que reacciona a la temperatura. Los que pesan más se sentirán calientes más rápidamente, mientras que los que tienen un IMC inferior a la media suelen enfriarse más fácilmente.
  • La edad también juega un papel importante. A medida que envejecemos, particularmente por encima de los 55 años, tendemos a ser afectados más fácilmente por el frío. 
  • La humedad afecta a la forma en que percibimos la temperatura. Si el aire es demasiado húmedo, puede afectar la capacidad de las personas para sudar, lo que puede llevar a un agotamiento por calor. Un nivel de humedad relativa del 40% es óptimo para la comodidad durante todo el año. 

Un ambiente demasiado húmedo o no lo suficientemente húmedo afecta a la temperatura percibida y a los niveles de confort. Por lo tanto, mantener un buen nivel de humedad relativa es clave para mantener un ambiente de oficina saludable y productivo. 

Como ves, los niveles de temperatura de la oficina pueden ser algo subjetivo dependiendo de las características de cada individuo, desde su sexo hasta sus características fisiológicas. Tener todo esto en cuenta ayudará a fijar una temperatura óptima soportable por todos los empleados.