Están bien pagados los profesionales españoles? ¿Qué pasará con los sueldos de los que sí tienen trabajo, este año? Para dar respuesta a estas y otras dudas salariales, los desayunos de Randstad-Infoempleo reunieron a los directores de Recursos Humanos de Bayer, Thyssenkrupp, Red Eléctrica de España, Leroy Merlin, Galp Energía y Randstad. Todos estuvieron de acuerdo: los empleados españoles, por lo menos los directivos, sí están bien remunerados.
«No se puede generalizar y hay que diferenciar entre profesionales y empresas, pero los ‘managers’ estamos en un nivel similar al que hay en Europa», explicaba Jesús Sanjurjo, director de Recursos Humanos de Thyssenkrupp. «Si hablamos de los cuadros medios más jóvenes, puede existir una diferencia del 25-30%».
Marisol Hernández, directora de Recursos Humanos de Galp, invitaba a las empresas a «mirar su propia capacidad de desarrollo, dejando a un lado las comparaciones». «Esa obsesión ha generado un problema de inflación: nos ha hecho sobrevalorar determinados puestos». Hablan estos profesionales de empresas como las que representan, con políticas retributivas maduras y claras. Las pymes y micropymes, por supuesto, no entran en esta valoración.
Sueldo y beneficios
«El sector eléctrico es algo diferente», añadía José García Moreno, director de Recursos Humanos de Red Eléctrica de España. «Desde siempre han sido empresas un tanto paternalistas, con muchos beneficios sociales y esta parte se valora mucho. ¿Somos los mejor pagados? Seguro que no, pero tenemos otras muchas cosas que son muy valoradas».
Para Enrique García Portal, director de Infoempleo.com, los profesionales tienden a la insatisfacción porque se comparan equivocadamente con quienes les rodean. «Desde las instituciones académicas más prestigiosas se inculca el principio de la competitividad externa y la equidad interna. La gente mira a su alrededor y analiza las condiciones de los demás, pero no es capaz de mirar hacia sí mismo y pensar en su propio proyecto profesional, huyendo de comparaciones».
«En Bayer, cuanto mayor es el nivel profesional y mayor es el valor añadido que aporta el trabajador, más cerca estamos de los salarios europeos. Nosotros sí comparamos los salarios, especialmente con Alemania, porque la central es alemana; pero no para fijarlos. Los salarios se fijan teniendo en cuenta la realidad de nuestro país: cómo está el mercado laboral, cómo están pagados los profesionales del sector…», dice Francesc León, director de Recursos Humanos de Bayer.
Nuno Filipe, el director de Recursos Humanos de Leroy Merlin, es portugués y lleva unos años en España. En ellos ha sido testigo de una corrección salarial imperceptible para la mayoría, «fruto de la competitividad de la economía española en los años 2004-2005. La competitividad de la economía española ha bajado y hay muchos recursos disponibles. Hoy la gente valora la es tabilidad en el empleo porque r reconoce que el sueldo no es el único factor de atracción en un proyecto de empresa».
«¿Y qué pasa con los beneficios sociales?», pregunta Enrique García Portal. «¿Han pasado a un segundo plano?». Para Carlos Carpizo, director de Recursos Humanos de Randstad, «estos beneficios van muy unidos a la percepción de los empleados. A veces perciben ciertos gestos como beneficios sociales y no lo son, y otras veces no los perciben hasta que los pierden, como en el caso de fusiones que llevan ajustes en este apartado. Yo no creo que se hayan perdido, sino que se han racionalizado. Lo importante es que el empleado conozca su paquete retributivo completo».
¿Y de lo mío, qué?
En cuanto a cómo negociar una subida salarial en un año tan complicado como este, los asistentes al desayuno patrocinado por Randstad e Infoempleo ofrecen diversos puntos de vista. «Es que en empresas como las nuestras, con políticas salariales perfectamente definidas, es absurdo pedir una subida de sueldo. Tú conoces las bandas salariales que tenemos y nosotros entendemos que estás aquí…», afirmaba Marisol Hernández, de Galp.
«En Bayer la experiencia es similar, pero siempre tienes a gente liderando proyectos o con una proyección altísima, a la que sí hay que aplicar una política de incremento salarial», analizaba Francesc León. «No hay que ir ni con amenazas, ni con el argumento L’Oréal ‘Porque yo lo valgo’, ni omparándote con el de enfrente», añadía Carlos Carpizo, de Randstad.
Nuno Filipe, de Leroy Merlin, añadía un componente esencial: «Las personas deben ser protagonistas en la construcción de sus sueldos, algo que se traduce en retribución variable unida a la generación de valor». «Hay que tener en cuenta el tema de la competitividad interna: el Madrid no tiene el mismo sueldo para todos los jugadores», puntualizó Filipe. «La valoración ahora es cuantitativa, no cualitativa, y se calcula en forma de EBITDA o de reducción de costes», añadió Marisol Hernández.
El director de Recursos Humanos de Thyssenkrupp se mostró de acuerdo, pero con una precisión: «La competitividad interna es un elemento más, pero que nadie se quede atrás porque por ahí no vamos a conseguir el paraíso». Para Jesús Sanjurjo, «la información es esencial para que haya un compromiso», un concepto vital para empujar las compañías hacia la competitividad perdida.
Este artículo no se adapta a la realidad profesional de muchos españoles que trabajamos en pequeñas empresas, sin beneficios sociales, sin horquillas salariales y minusvalorados profesionalmente, en especial los jóvenes, mucho mejor preparados que compañeros con más experiencia.Se nos paga lo mínimo que reglamentariamente pueden. Eso es de lo que tienen que hablar y no de directivos enchufados. (con todos los respetos)
ANTES, hace unos pocos años atrás, uno podía pedir un aumento de sueldo y aunque este fuera poco, lo obtenía. MÁS ADELANTE, y hablamos de hace unos 8 años para acá, ya el jefe te ponía pegas y trabas para no dártelo. HOY, no se podría ni intentar, pues irías de patitas a la calle, con el riesgo de quedarte sin sueldo y sin el tan preciado y buscado ( empleo).
Hablan del compromiso del obrero en la empresa por ir más allá en cuanto a formación, conducta y valores, para ir labrándose uno mismo su sueldo y ganárselo con la sudor de todo su cuerpo, y no solo de su frente.¿ Que más quieren que hagamos, ¿ Que nos saquemos la carrera de Astronauta?, Seguro que llegue el día en que así sea.
Para una gran mayoría en este país, el ANTES era como el MÁS ADELANTE, y el MÁS ADELANTE de ayer ha sido como el HOY en el que vivimos actualmente, y hablamos claro está del que tenga ese preciado empleo, pues los hay con no tanta suerte, entre los cuales me incluyo yo.
Te puedes formar en lo que quieras y tener la experiencia que quieras, pero si no hay trabajo no vas a ningún sitio, incluso puedes ser el mejor de tu categoría, incluso así,nada de nada. Pero aún teniendo la tan preciada suerte de trabajar ¡que bonito suena eso!, y viendo y sabiendo la tabla de sueldos y jornadas, no queda mas remedio que resignarse y trabajar la horas que diga el jefe y cobrar lo que te paguen, ¡porque lo dicen ellos y punto!….Amigos, vamos para atrás en vez de lo contrario, hay que resignarse, apretarse el cinturón y las cordoneras, Si queremos levantar este país, ¿O quizás tenemos que ser como ellos, EMPRESARIOS o VERDUGOS? mejor dejémoslo así…
A este paso habrá que pagar a las empresa en vez de ellas a nosotros. Es mi más modesta opinión.
A las pequeñas empresas no les cae el dinero del cielo. Pero cuando hay trabajadores que no quieren trabajar y que en hacer los trabajos se duermen, llegan a sus puesto tarde y encima con bastantes defectos, esto parece que nunca es así y que siempre tiene la culpa los empresarios. estos mismos trabajadores quieren cobrar como es logico a final de mes. Pero para poder cobrar hay que trabajar desde el primer jefe hasta el último empleado y estos mismos bagos piensan que el jefe nunca trabaja. Seguramente el jefe en el 90% de las PYMES es el que mas trabaja de todos los que componen la empresa y no siempre es recompensado como estos mismos bagos piensan. Ahora todo el mundo cree que trabaja de funcionario aunque esten en PYMES privadas y de 3 o 4 trabajadores.
No está mal que los sueldos de los directivos sean altos. Es normal, porque bastante se lo han currado para llegar a donde están. Desde temprana edad estudiando y preparándose, posteriormente subiendo la pirámide empresarial, que no es nada fácil. No obstante, al final del día todos hacen sus 8 horas de trabajo o más y no está para nada bien que exista una diferencia salarial tan alta, donde los únicos perjudicados sean los cargos intermedios y bajos, que a fin de cuentas son los que mantienen a las grandes empresas.