El concepto de ghosting se aplica a varios ámbitos, desde el afectivo hasta el laboral. Este último está relacionado con el no contestar a las candidaturas que no han sido seleccionadas. Entre las razones para cambiar esta actitud, destaca evitar el impacto negativo que tiene esta práctica en tu marca empleadora, y que puede conllevar sanciones por no cumplir la normativa de protección de datos al no informar sobre el tratamiento del CV recibido.

¿Qué es el ghosting laboral?

El ghosting, derivado del inglés ghost (fantasma), consiste en terminar una relación, en este caso laboral, cortando todo contacto con la otra persona sin darle ninguna explicación. También tiene un uso privado referido a vínculos afectivos. En ambos casos, el rasgo fundamental es desaparecer, no contestar, en lugar de verbalizar una negativa o finalizar formalmente esa relación.

En muchas ocasiones es la consecuencia de haber asumido una excesiva carga y no poder responder al compromiso. Ya sea con la tardanza en contestar un mail, como en no llamar para informar del estado de la solicitud.

La alta demanda de puestos de trabajo, convierten a los procesos selectivos en una carrera maratoniana. Y en la criba, no todas las candidaturas son atendidas como deberían serlo para cuidar la marca empleadora. Es fundamental que tengas preparado al menos un mail de respuesta para los trabajadores que no han sido seleccionados. No puedes permitir que ni una sola candidatura tenga la sensación de seguir en el proceso de reclutamiento, pero ya la hayas descartado.

Seleccionador enviando un mail de respuesta para los trabajadores no seleccionados y evitar el ghosting laboral

Razones para dejar de hacer ghosting

Analizando con humildad esta mala praxis, seguro que encuentras muchas razones para dejar de hacer ese ghosting, que no es voluntario, pero que de hecho es muy frecuente. Algunas de ellas son:

  • Repercute negativamente en tu marca de liderazgo.
  • Conlleva sanciones si te denuncian por haber recibido un CV y no has informado de su tratamiento. Ya hay casos alegando la protección de datos.
  • Debes cuidar la salud mental de trabajadores y posibles empleados. El estrés generado por el futuro incierto en el ámbito laboral sigue creciendo entre la población.
  • Obstaculiza las buenas prácticas como: la empatía, el saber delegar o prestar la atención que merece la fuerza laboral. No es una mera herramienta para satisfacer los planes estratégicos de la compañía.

Que las causas y motivaciones del proceso de reclutamiento escapen a tu potestad, no significa que no sea tu responsabilidad mantener la comunicación lo más periódica posible. Aunque sea una cuestión coyuntural como no tener tiempo real para tomar la decisión, debes mantener el contacto con la persona que opta por el puesto de alguna manera.

Acabar con el ghosting en numerosas circunstancias tiene más que ver con la organización y gestión del tiempo, que con una adaptación significativa de la cultura corporativa. Además. es importante cuidar a esos perfiles que han quedado especialmente en el final del proceso selectivo, porque probablemente formen parte de la plantilla más adelante.