El Proyecto Aristóteles es una investigación realizada por Google para encontrar equipos eficaces. El gigante tecnológico fomenta el trabajo en equipo alrededor de dos ejes: la seguridad psicológica del grupo y la confianza en los datos. La combinación de lo cuantitativo y lo cualitativo permite evaluar a los recursos humanos en su trabajo en equipos. La clave es localizar los estándares de comportamiento recogidos en reglas y normas no escritas.

Claves del proyecto Aristóteles

El origen del Proyecto Aristóteles está en la evaluación del trabajo en grupo. ¿Cómo optimizar el rendimiento del talento cualificado cuando conforman equipos? No se trata solo de habilidades blandas o transparencia. El objetivo de esta propuesta promovida por Google era buscar los factores de éxito en los equipos, localizando los estándares de comportamiento registrados en reglas y normas no escritas.

Una de las conclusiones que fundamentan las dinámicas de alto desempeño en los equipos es que necesitan entornos donde la seguridad psicológica prime. Esta no puede reducirse a respetar los turnos en las reuniones y ser asertivos con las críticas.

La científica de Harvard especialista en comportamiento organizacional, Amy Edmondson, introdujo por primera vez la construcción del equipo con seguridad psicológica y la definió como “una creencia compartida entre los miembros del equipo de que el equipo es seguro para tomar riesgo interpersonal”. Así, observaron que compartir datos sensibles, relacionados con su historial médico por ejemplo, generaba interacciones que hacían profundizar la relación laboral y agilizaban los procesos. Las barreras que dificultaban el avance, como las luchas por el liderazgo, se disolvían al comprender los trabajadores que estaban juntos en el mismo barco.

Equipos eficaces en Google

Para Google, “un equipo es la unidad molecular donde la producción ocurre, donde las ideas innovadoras son concebidas y probadas, y donde los empleados experimentan la mayor parte de su trabajo”. El Proyecto Aristóteles concluyó que comprender y ser capaces de influir sobre las normas de comportamiento grupal era fundamental para mejorar el desempeño de los equipos de trabajo en Google. El equipo trasciende sus componentes o en palabras del filósofo: “el todo es mayor que la suma de sus partes”. Además de la seguridad psicológica, las otras claves para el buen funcionamiento grupal son:

• Confianza en la accesibilidad y compromiso del resto de los integrantes del equipo.
• Claridad en los objetivos y las metas, tanto en contenido como en tiempo o recursos para su consecución.
• Propósito: los trabajadores deben sentirse parte necesaria del proyecto.
• Impacto: deseo de contribuir en ese reto, con altas cargas de innovación y creatividad. Reconocimiento del valor individual de su trabajo detallando cómo repercute en los logros colectivos.

Google ha confirmado a través del Proyecto Aristóteles, que los trabajadores necesitan poder compartir sus miedos e inseguridades con el resto del equipo, sin recriminaciones. A su vez, señala que las empresas que tratan de optimizar cada dato sin cuantificar, y sin valorar esta información emocional, no alcanzan los objetivos ni saben la causa.