Silvia Damiano, experta en inteligencia emocional.

En los últimos 10 años ha surgido de los centros de investigación información sobre cómo funciona nuestro cerebro. Estamos atravesando una verdadera «revolución cerebral» que no podemos ignorar, sobre todo si nuestra tarea es cuidar de los recursos humanos de una empresa.

Un buen profesional de recursos humanos necesita preguntarse ¿qué puedo aprender del mundo de la ciencia para tener nuevas herramientas que me hagan operar de una manera más eficiente y, por ende, ayudar a las  personas de la organización para que trabajen mejor?

He seleccionado dos puntos que considero de gran relevancia. En primer lugar, debemos comprender cómo funciona nuestra corteza prefrontal (CPF), un área pequeña ubicada en los lóbulos frontales del cerebro, justo detrás de la frente. Es responsable de planificar, establecer prioridades,  tomar decisiones, alinear nuestros comportamientos con nuestros objetivos, hacer juicios sobre lo que está bien o mal y de la memoria a corto plazo, pero tiene una capacidad finita y, después de un par de horas, «se agota» si no le damos un descanso.

Cada día nos enfrentamos con exceso de información, mensajes electrónicos que jamás acaban y reuniones consecutivas. Tanta actividad mental puede llegar a agotar esta parte pequeña y sensible del cerebro, aumentando el  estrés.

Cuando los líderes de una empresa operan con altos niveles de estrés, la capacidad para lograr buenos resultados económicos, manejar negociaciones difíciles, prestar atención a los demás o generar grandes ideas se reduce significativamente.

En segundo lugar, debemos pensar en la utopia de la multi-tarea. Una habilidad crítica en los negocios es poder manejar muchas tareas con pocos  recursos. Pero, ¿es esto realmente posible? La multi-tarea requiere la consideración de varios conceptos al mismo tiempo. Sin embargo, las investigaciones más recientes establecen que el cerebro no puede manejar más de cuatro conceptos a la vez. Si uno de estos conceptos es totalmente nuevo, el cerebro podrá prestar atención a eso solamente, ignorando lo demás, proceso llamado «atención selectiva».

La multi-tarea se vuelvemás fácil cuando consideramos ideas o conceptos ya conocidos. La memoria, el rendimiento y la precisión decaen rápidamente si empujamos a la CPF a hacer frente a muchas cosas a la vez, ya que la misma requiere de una gran cantidad de energía para efectuar este proceso.

¿Cómo podemos incorporar este conocimiento en nuestras prácticas de recursos humanos? Indudablemente, hay mucho para reflexionar y para aplicar.