El máximo organismo del poder judicial en España reconoció, en una sentencia sin precedentes en nuestro país, que un ama de casa tenía derecho a percibir una indemnización por los años dedicados al trabajo doméstico, pese a haberse producido el divorcio en régimen de separación de bienes y pese a no haber contribuido la labor de ella al incremento del patrimonio del matrimonio ni del cónyuge. De hecho, la sentencia del Tribunal Supremo establecía la siguiente doctrina: «El derecho a obtener la compensación por haber contribuido a las cargas del matrimonio con trabajo doméstico en el régimen de separación de bienes requiere que habiéndose pactado este régimen, el cónyuge haya contribuido a las cargas del matrimonio solo con el trabajo realizado para la casa. Se excluye, por tanto, que sea necesario para obtener la compensación que se haya producido un incremento patrimonial del otro cónyuge».
Hace solo tres años, el Instituto Nacional de Estadística llevó a cabo un estudio en el que pretendía cifrar con la mayor exactitud posible cuál sería la aportación de las amas de casa españolas al Producto Interior Bruto nacional en caso de que su trabajo fuera remunerado. Los datos demostraron que hasta un 27% del mismo podría corresponder a esta actividad que, sin embargo, no es remunerada ni le da acceso a quienes la practican a la prestación de derechos sociales.
Hoy, por primera vez, y aunque con algunas limitaciones, la justicia española ha dado el primer paso en el largo camino de reconocer a las amas de casa como trabajadoras. En la Confederación Española de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (CEACCU) no se sienten del todo satisfechos con la sentencia del Tribunal Supremo. Isabel Ávila, su presidenta, tiene claro que su opinión es «favorable, aunque con algunos peros». Esto se debe a que «se ha tenido en cuenta solo una parte de las reivindicaciones que veníamos haciendo desde CEACCU. Por ejemplo, que solo podrán acceder a esta indemnización las mujeres que se divorcien en régimen de separación de bienes y acogidas al derecho común; por el momento quedan totalmente excluidas aquellas que estuvieran casadas en régimen de bienes gananciales y acogidas al derecho foral».
En España hay en torno a diez millones de mujeres cuya ocupación consiste única y exclusivamente en las labores del hogar. El resto del mundo, lógicamente, no es una excepción, y las preocupaciones personales y profesionales de las madres y amas de casa son compartidas a lo largo y ancho del planeta. De hecho, esta sentencia del Supremo coincide con el lanzamiento de un ambicioso proyecto por parte de la sección europea del Movimiento Mundial de las Madres (MMMEurope). Se trata del estudio «Lo que importa a las madres en Europa», que recoge, entre otros puntos, la importancia de dotar al ama de casa de unas garantías económicas en caso de que el matrimonio que la sostiene se desintegre. De ahí que Anne-Claire de Liedekerke, presidenta del movimiento, se sienta satisfecha con la decisión judicial del Tribunal Supremo y resalte la importancia de este manifiesto diciendo que «los descubrimientos y las estadísticas permiten a los responsables políticos europeos la posibilidad de responder con medidas específicas. Los resultados son significativos en el conjunto de la sociedad europea. Esta mayoría silenciosa tenía que ser escuchada».
«Asistentas externas»
Isabel Ávila, de CEACCU, insiste en que la sentencia del Supremo es positiva, pero de ahí a afirmar que implica reconocer a las amas de casa como trabajadoras es «mucho decir». Para ella, «de alguna manera da respuesta a las reivindicaciones que venimos haciendo, pero no de una forma amplia. La mayoría de los matrimonios españoles se llevó a cabo en régimen de bienes gananciales, excepto en Cataluña, Baleares y una parte de Valencia; hay muy pocos en régimen de separación de bienes, que es a los que afecta la jurisprudencia sentada por el Supremo».
Ávila también tiene una opinión negativa de la cuantía de la indemnización adjudicada: «Se ha estipulado el salario mensual atendiendo al de una asistenta externa, pero un ama de casa hace un trabajo más parecido al de una interna o, incluso, superior», argumenta.
Es cierto que no hay ni una sola ama de casa que trabaje ocho horas al día, ni libre los fines de semana, ni tenga 22 días de vacaciones… Además, tal y como remata Isabel Ávila, «una asistenta cotiza a la Seguridad Social y tiene derecho a prestaciones sociales cuando se jubila, mientras que un ama de casa, no; ni siquiera después de la sentencia del Supremo».
QUE BIEN,ME ALEGRO QUE AVANZEMOS AUNQUE SEA POCO A POCO!!! y esto quiere decir que a las mujeres que tenemos que trabajar fuera de casa y dentro de ella porque no tenemos otra opcion tambien se nos va a considerar AMAS DE CASA??? O NOSOTRAS NO SOMOS AMAS DE CASA,SOMOS SOLO TRABAJADORAS Y DESCANSAMOS CUANDO LLEGAMOS AL DOMICILIO?? O LO HACEMOS LOS FINDES QUE NO TRABAJAMOS FUERA?? UMMMM CUANTAS CUESTIONES VERDAD??? PORQUE CLARO,EVIDENTEMENTE LAS MUJERES QUE TRABAJAMOS FUERA TAMBIEN LO HACEMOS EN NUESTRO HOGAR,LIMPIAMOS,PLANCHAMOS,COCINAMOS ETC ETC EXACTAMENTE IGUAL PERO ESO SÍ,CON MENOS TIEMPO PARA DEDICARLE POR LO TANTO DOBLAMOS EN ESFUERZO Y NO DESCANSAMO NUNCA.
Que verguenza para nuestro gobierno.Se supone que así nos quieren tener contentas a las amas de casa.Sin nosotras esos hombres no habrían llegado ni al primer peldaño en el que se encuentran…Y ahora resulta que están dejando claro el desprecio con el que valoran nuestros sacrificios de estar siempre o en la mayor de las situaciones por detrás de ellos…¿Se supone que están fomentando que se mantengan las familias unidas o que se lleven a cabo más divorcios? Porque me parece ridículo,en los tiempos que corren,que se diga que sólo te remuneran o «agradecen» el trabajo si te divorcias….pues ala,al carajo con el matrimonio y la unión familiar…Pobres de los hijos habidos en esos matrimonios…Pobre de nuesros políticos que pretenden destrozar el poco respeto que hoy en día se tiene en las familias por la unión de estas…Ojalá algún día los haga pensar en sus madres y hermanas,ya que es evidente que no lo hacen sobre sus esposas…
HOLA ENTONCES A LAS QUE ESTAMOS CASADAS NO HAY AYUDA?
DE QUE DINERO ESTAMOS HABLANDO?SALUDOS
soy ama de casa extranjera residente con papeles en regla tengo dos hijos menores y mi marido parado sin cobrar nada parque se le agoto todo subsidios ,,, tengo derecho a alguna prestación de la seguridad social o de el estado o mi trabajo no esta reconocido y gracias
A ver, aquí hay que aclarar varios puntos: SUELDO PARA AMAS DE CASA.
1) Todo el mundo tiene derecho a gozar de un salario mínimo base aunque sea un poco, tenga el sueldo que tenga, tenga o no trabajo, esto ayudaría a todos los negocios a salir adelante porque todo el mundo podría comprar y los negocios no se quedarían sin clientes,,, pero si ustedes siguen prefiriendo darles su dinero a los políticos para que encima les roben más sin hacer nada, bueno si, perjudicándoles..allá con su pobre inteligencia.
2) Los niños no es justo que no puedan crecer sin el apoyo ni de su madre ni de su padre, solo en colegios impersonales, las personas asi crecen sin estima y sin saber quienes son. Así los educan los intereses y no la familia ni el corazón. inhumano. por estar ambos trabajando.
3) no hay derecho de trabajar 11 meses y solo tener 1 mes de vacaciones al año ¿que se han creido? esto se llama explotación.
4) no les doi más ideas empiecen ya a ver la realidad de lo que es un ser humano y que es lo básico que necesita.
Pero, ¿ qué narices es un ama de casa ?. Una señora privilegiada, sin jefes, sin horarios, sin estrés, que realiza tranquilamente sus tareas del hogar. Cuya única preocupación es mantener contento a su marido, para que la siga manteniendo. Las verdaderas luchadoras somos las que trabajamos fuera y dentro de casa, que no tenemos tiempo ni para respirar. Como el estado les de un sueldo, nos quedamos todas en casa, que se vive muy bien así y se tiene mucho tiempo libre. Hay que ser vaga e inútil, para que con esta crisis , te quedes en tu casa, pintando la mona.
Estas señoras son unas vagas. Las tareas del hogar las hacemos todos, salvo que tengas mucho dinero y contrates a una empleada del hogar. Demasiados privilegios tienen ya , para que encima se les reconozcan más derechos. Yo me levanto a las seis de la mañana y cuando vuelvo del trabajo, tengo que limpiar, cocinar y planchar. Y estas princesas tiene mucho tiempo libre. Son una especie de prostitutas, que han encontrado a un tonto que las mantiene, a cambio de sexo y de tener la casa un poco limpia. No me extraña que tengan depresiones, porque en el fondo saben que no sirven para nada.
No deberían tener derecho ni a la Sanidad, ni a una pensión de viudedad, ni a nada. Son una vergüenza para el resto de las mujeres , que trabajamos el triple que ellas.
Antes de tener niños yo tenía mejor trabajo que mi marido. Lo dejé para mudarme a otro lugar donde mi marido pudiera desarrollarse profesional y personalmente. Ingenuamente pretendí incansablemente encontrar empleos como el que había abandonado. En cinco años no lo he podido conseguir: primero embarazada, después con dos hijos pequeños, con unos horarios y una carga de trabajo de mi marido incompatibles con poder atender a los hijos, sin nadie de la familia cerca que pudiera ayudarnos. Mi disponibilidad y mi atractivo para los empresarios es mucho menor que antes de tener niños. ¿Dónde dejaría a los niños cuando se ponen enfermos? ¿Cómo voy a contratar a una persona para asistir a los niños si no me ofrecen sueldos apenas superiores a los que veo justo que tendría que pagarle a esa persona? Y aunque pudiera financiar una persona que atendiese a los niños, me resulta muy triste aceptar que unos niños se críen en manos de extraños desde que se levantan hasta que se acuestan. Las señoras de los posts anteriores que tachan de «vagas», «inútiles», «princesas» y hasta de «prostitutas» a las mujeres amas de casa, demuestran una nula comprensión de la evidente complejidad del mundo laboral, de la familia, de las relaciones personales y de pareja, de la educación de los hijos, de los mecanismos de solidaridad y sacrificio por el prójimo, etc. Aparte de por su ignorancia y simpleza, la opinión de estas mujeres destaca por ser un homenaje a la falta de humanidad, a la nula comprensión del feminismo y de la conciencia obrera. No, no tenemos que agachar la cabeza ninguno de las mujeres -y hombres, que los hay cada vez más- que sacrificamos en muchos casos nuestras carreras profesionales, nuestros derechos futuros a una pensión, nuestra independencia económica y una fuente de ingresos -y por tanto, un poder adquisitivo mayor-, ya sea de manera más o menos premeditada como a la fuerza víctima de las circunstancias, y, cuando se elige o se acepta, en aras del bienestar común de la familia y el particular de nuestros familiares, sobre todo el de los seres más vulnerables, el de nuestros hijos.Otra cosa es que en algunas familias, para poder subsistir, sea indispensable que sean dos los que salen a la calle al precio que sea. Pero ningún padre o madre en esa situación tiene por ello autoridad moral sobre los que, en otras circunstancias distintas, se quedan a cuidar a su familia porque su ecuación particular les da como resultado que ésa es la solución más adecuada, sobre todo para los niños. Y ninguna persona que se sienta explotada o esclavizada por sus obligaciones laborales y domésticas -o por sus empleadores y sus familiares- puede pretender que su situación sea el ideal a seguir y que los que no están igual de explotados o esclavizados sean indignos de nada ni tengan que avergonzarse ni rendirles pleitesía.
Con mucho cariño y respeto a todos los que contribuyen al bien de sus hijos, su familia, la sociedad y la humanidad, cada uno a su manera y según sus circunstancias: María
María, que bien!! se ve que tienes cultura, y hablas con el amor que hay que tener por la familia, y por supuesto que las personas obligadas a trabajar y que llegando a casa tienen q ocuparse del quehacer doméstico no pueden enjuiciar la labor de «las amas de casa».
A ellas les deseo que sus maridos compartan las tareas, todos saben fregar, lavar, planchar…pero no es solo eso.
Elisa cómo se puede hablar así de otra persona con tanto resentimiento, seguro que tú cuando te has marchado al trabajo has necesitado de otra persona a que cuidara de tus hijos . No sé puede ser tan prepotente y juzgar a todas las amas de casa , pues cada una tiene sus circunstancias particulares
Elisa por favor tienes que respetar a la gente, yo no se si es verdad que eres una mujer, pero por lo que estás contando no tienes conocimiento y ademas eres agraesiva