Entre las muchas modalidades de entrevista, una que aporta ventajas al proceso de selección es la realizada por pares. Es decir, por otros compañeros de profesión. Muchas compañías siguen implementando mejoras en los procesos de reclutamiento. El objetivo de la entrevista por pares es evaluar cómo encaja la candidatura en el equipo y en la cultura empresarial. Mejorar la experiencia del candidato y la reputación como employer branding son consecuencias orgánicas.
Entrevista por pares
Esta metodología de selección entre pares o entre iguales implica que la entrevista sea realizada por otro profesional del equipo, en lugar de un responsable o de alguna persona de recursos humanos. Es aconsejable preparar la entrevista previamente con el equipo. Elaborar un listado de preguntas adecuadas al cargo de la oferta es necesario. Para hacer partícipe a la plantilla y fortalecer el team building, pasa un formulario para construir ese listado de manera conjunta.
En esta modalidad en particular, es fundamental contar con el detalle del puesto de trabajo. Para ello, el compañero que vaya a realizar la entrevista puede definir sus tareas y especificar las expectativas de desempeño de su trabajo. Es oportuno además señalar las habilidades y competencias que se esperan encontrar en la nueva candidatura para tenerlas presentes a modo de checklist en la entrevista.
Por otra parte, la persona que realice las preguntas tiene que interiorizar todas las categorías privadas e ilegales por las que no debe manifestar su interés en la entrevista laboral. Entre ellas están etnia, sexo, religión, estado civil, edad, nacionalidad o discapacidad. Si es necesario recabar información acerca, por ejemplo, de su relación con la tecnología, las preguntas tienen que ser amplias para deducir la información, garantizando el cumplimiento de la protección de datos.
Ventajas para la selección
La principal ventaja en una entrevista por pares frente a una realizada por el futuro responsable del departamento y otro trabajador de recursos humanos es que quien opte al trabajo mejora su experiencia del empleado. Es habitual que se sienta más relajado y confiado si en la entrevista está un compañero. Además, puede preguntarle por su propia vivencia en la compañía y en el equipo.
Esta buena experiencia del candidato repercute en la mejora de la reputación de la compañía. Por lo tanto, será una manera efectiva de atraer el talento cualificado, que no sentirá reparos ante la entrevista por las buenas referencias de otras candidaturas. Los trabajadores saben qué recomendar a sus pares, enfatizando las buenas condiciones de salario emocional.
En este sentido, otra de las ventajas es que no necesitas comunicar el ambiente laboral ni la cultura empresarial pues serán los propios trabajadores en su rol de entrevistador quienes transmitan ese conocimiento a las candidaturas. El onboarding es más fluido con este tipo de entrevistas, pues el compañero que la realiza estará atento y disponible en los primeros días para facilitar y optimizar su incorporación. Los candidatos que pasen la entrevista, así como quienes la realicen, se sentirán empoderados. Esto hará que se impliquen en el proceso de selección y, por tanto, que adquieran mayor compromiso con los objetivos empresariales.