Si uno de cada tres trabajadores está dispuesto a dejar su empresa por un entorno más agradable de trabajo, está claro que es fundamental que las empresas hagan hincapié en la empatía en el trabajo.
¿Cuál es el desafío? En realidad, la empatía se aprende a nivel individual, no viene en ningún manual del empleado, ni se trasmite desde la dirección.
Sin embargo, cuando te responsabilizas y haces lo posible por entender mejor a tus empleados o compañeros de trabajo, tu compañía y todos sus miembros se benefician, evitando problemas a largo plazo como la depresión laboral.
La empatía en el trabajo es la capacidad de entender los pensamientos y sentimientos de otra persona. En otras palabras: compasión. Escuchar a tu empleados y compañeros de trabajo, tomando en consideración sus preocupaciones.
A continuación, te hablamos de todas estas cuestiones en detalle.
Cuáles son los beneficios de la empatía en el trabajo
Los beneficios de la empatía en el trabajo se reflejan en las encuestas. Según el informe Workplace Empathy Monitor 2017 de Businessolver, la empatía tiene un impacto directo en la productividad, la lealtad y el compromiso de los empleados.
Estos son algunos de los beneficios de la empatía en el trabajo que revela el informe:
- 77% de los trabajadores estarían dispuestos a trabajar más horas en un lugar de trabajo más empático; el 60% aceptaría un salario reducido por el mismo motivo.
- El 92% de los profesionales de recursos humanos indican que un entorno de trabajo empático es un factor importante para la retención de los empleados.
- El 80% de los millennials afirmaron que dejarían su trabajo actual si su oficina se volviera menos empática. El 66% de los Baby Boomers también compartieron este sentimiento.
Está claro que la empatía en el trabajo proporciona beneficios significativos y concretos.
Cómo conseguir que los empleados tengan empatía
Valora tu capacidad para escuchar activamente
Cuando tus empleados o compañeros de trabajo vienen a ti con preguntas y preocupaciones, ¿qué tal escuchas?.
La mayoría de los empleados no escuchan lo que sus colegas tienen que decir. Afirmar ser un «buen oyente» simplemente no es suficiente en un mundo donde el 30% de los empleados sienten que sus opiniones no importan.
Escuchar activamente a tus empleados o compañeros de trabajo requiere un esfuerzo. Cada correo electrónico o conversación cara a cara con tus colegas merece toda tu atención. Comprende que tu tiempo en el lugar de trabajo es tan valioso como el de ellos, y que escuchar mejor significa resolver los problemas de manera oportuna.
Otro aspecto vital de ser un mejor oyente es estar tan disponible como sea posible.
Ponte en el lugar del otro
Realmente, nunca llegas a conocer a una persona hasta que caminas en sus zapatos. En el trabajo, esto significa abordar las preocupaciones de tus empleados y compañeros con una mente abierta. Tener empatía.
¿Piensas que tienes mucho qué hacer? Tus empleados o compañeros de trabajo probablemente se sienten igual. El agotamiento afecta al 40% de los empleados, independientemente del departamento. Si un compañero de trabajo parece irritado o molesto mientras habla contigo, recuerda la última vez que tuviste un día difícil.
Evita asumir demasiado
Es decir, ofrece a tus empleados y compañeros el beneficio de la duda antes de juzgar su comportamiento en la oficina.
No asumas automáticamente lo peor de la gente. Tal vez ese compañero de trabajo que se ha vuelto cada vez más conflictivo está pasando por un momento difícil en casa.
El estrés en el trabajo viene en distintas formas y tamaños. Practicar la paciencia y la empatía en el trabajo con tus compañeros es clave para tener un ambiente laboral sano, en el que todos se sientan a gusto.