Hace tiempo que las nuevas tendencias en gestión de personas han modificado los perfiles profesionales que buscan las empresas. En las últimas décadas, hemos pasado de una orientación hacia perfiles técnicos y especializados a la búsqueda de personas que presentan una serie de habilidades interpersonales que están relacionadas con sus rasgos de carácter. En este artículo, conoceremos cuáles son las cuatro Soft Skills para mejorar la productividad, más demandadas por las empresas.
El cambio de tendencia en los procesos de reclutamiento de las empresas
Las empresas de hoy en día siguen buscando la diferenciación, el valor añadido. Sin embargo, los avances tecnológicos y los procesos de globalización, no solo han aumentado la feroz competencia existente en el mercado, sino que la ha dinamizado hasta niveles vertiginosos.
Por ello, las organizaciones han modificado poco a poco la tendencia en los procesos de reclutamiento de las últimas décadas. Hoy en día, hemos pasado de una búsqueda de competencias técnicas o hard skills, a buscar personas que se diferencien no tanto por su currículum sino por la capacidad para la gestión del tiempo, por su adaptabilidad a diferentes situaciones, o el desarrollo de su inteligencia emocional.
El motivo es simple: la perspectiva ha cambiado, y los directores de empresa han entendido la importancia que tienen las personas en el desarrollo de sus negocios. Hoy en día, tiene mucho más valor contar en el equipo con una persona con pensamiento crítico, empatía o con capacidad de trabajo en equipo, de establecer una comunicación efectiva o de tomar decisiones, que un perfil técnico, académico o con mucha experiencia pero sin habilidades de este tipo.
En un entorno tan cambiante, elementos como la flexibilidad, la iniciativa o capacidad para la resolución de problemas son un valor definitorio del éxito de las empresas. Esto, a su vez, obliga a modificar los planteamientos de selección y establecer estrategias de reclutamiento distintas a las que se aplicaban hasta ahora. Por otro lado, las empresas también buscan rentabilizar sus equipos, y orientan sus planes de formación hacia el liderazgo y las competencias personales de sus equipos.
4 Soft Skills para mejorar la productividad de los trabajadores
En función de factores internos, como la propia cultura empresarial, o de elementos externos como las características del mercado y la competencia, las empresas pueden demandar unas Soft Skills u otras de sus trabajadores.
Además, está demostrado que existen algunas que favorecen el aumento de la productividad y la rentabilidad de los empleados. Algunas de las más conocidas serían las siguientes:
- Flexibilidad: como decíamos, tener la capacidad para trabajar en diferentes escenarios y situaciones y, además, llegar a ser rentable y tener éxito en dichos contextos, es una de las características personales más valoradas.
- Capacidad de gestión del tiempo: tener la habilidad de priorizar y organizar nuestras tareas, de delegar o de decir que no en determinadas situaciones que vienen desde otros departamentos o personas, son habilidades relacionadas con la responsabilidad de saber gestionar el tiempo del que disponemos para ser lo más eficientes posibles.
- Creatividad: por supuesto es una de Soft Skills más importantes. Solo las empresas creativas e innovadoras consiguen avanzar en un mercado tan competitivo e igualado.
- Inteligencia emocional: antes de que Daniel Goleman comenzara a hablar de ella, la inteligencia emocional era una gran desconocida. Sin embargo, en los últimos tiempos, las emociones de las personas que conforman el equipo ocupan el primer plano y su relación con la productividad y el sentido de pertenencia a la empresa es cada vez más indiscutible.
Los profesionales de RRHH deben establecer las técnicas de reclutamiento y los procesos de formación más adecuados para captar, desarrollar y fidelizar a las personas que presenten las habilidades blandas más adecuadas para el crecimiento de la empresa.
