El perfil de directora o director de recursos humanos (Chief Human Resources Officer o CHRO) ha evolucionado en los últimos años. De gestionar los trámites administrativos, como las nóminas o las vacaciones, y coordinar el reclutamiento ha pasado a desempeñar tareas complejas en el ámbito global e híbrido. Los ejes sobre los que pivota su productividad son el talento, las competencias y la cultura empresarial.

¿Qué funciones tiene el CHRO?

La responsabilidad de gestionar el equipo y optimizar el capital humano de una compañía recae en el CHRO, es decir, la persona que dirige el departamento. Sus funciones más conocidas son las de selección y reclutamiento, con las pruebas asociadas, ya sean psicológicas ya en entrevistas para evaluar las competencias y la experiencia. Sin embargo, es también una de sus funciones la de describir cada puesto de la organización, definiendo las tareas y la capacitación asociada necesaria.

La agencia del CHRO es activa pues se trata de un perfil que debe conocer la estrategia de negocio y cómo esta se proyecta a futuro. Sus decisiones de contratación o regulación afectan a todos los niveles de la empresa. En esta línea, su capacidad de innovación tendrá un impacto positivo en la competitividad de la organización. Para alcanzar el éxito, debe trabajar en colaboración directa con el CEO, es decir, el director ejecutivo, y con el CFO, esto es, el director de Finanzas.

¿Qué es el CHRO?

Tips para dirigir el departamento de RRHH

Las funciones propias del CHRO están vinculadas a sus responsabilidades en la gestión del equipo humano. Sin embargo, la mayor ventaja competitiva si optas al puesto será contar con habilidades blandas para generar un buen clima laboral, para la resolución de conflictos y para plantear soluciones de manera asertiva.

Ya no es suficiente con seleccionar al talento óptimo para el puesto. Ahora es necesario que presenten en tu propio proceso de selección un plan para atraer y retener el talento cualificado, así como para capacitar y potenciar el capital humano que pertenece ya a la plantilla. Para ello, desarrolla un plan de incentivos accesibles y justos.

Con estas claves, ya solo tienes que seguir estos sencillos tips y el puesto es tuyo:

  • Promueve cambios positivos en el personal. Busca la superación personal y como grupo, mejorando el rendimiento y la productividad. Fortalece el plan de carrera profesional para retener el talento.
  • Fomenta el engagement. Comunica a toda la plantilla la estrategia para que entiendan el impacto y participen activamente en la consecución de los objetivos.
  • Prioriza el bienestar de los trabajadores. Sitúa en el centro de tu estrategia la experiencia del empleado.
  • Utiliza indicadores de medición y evaluación. Dedicar tiempo a la planificación y a registrar datos, es la clave del éxito.
  • Apóyate en herramientas tecnológicas. La gran mayoría de las empresas se apoyan en las plataformas de reclutamiento y en los software para gestionar todo el proceso.
  • Confía en tu propuesta y mantén una actitud segura en el liderazgo.