Ya sabes que el proceso de reclutamiento es uno de los momentum de los recursos humanos. La teoría de Gardner sobre las inteligencias múltiples puede abrir una perspectiva eficaz para contratar a los perfiles adecuados y contribuir al aumento de la productividad de la compañía. Surgió como crítica a los test de inteligencia basados solo en 2 de las 8 categorías, es decir, lógico-matemática y lingüística. El resto son: espacial, musical, kinestésica, intrapersonal, interpersonal y naturalista.

Conoce las inteligencias múltiples

Según la teoría de las inteligencias múltiples del psicólogo estadounidense Howard Gardner, si una empresa quiere sobrevivir, es fundamental que sus trabajadores ocupen los puestos en los que mejor puedan explotar sus habilidades y conocimientos. Entre los gamers suele decirse: “el juego no se adapta a ti, tú tienes que adaptarte al juego”. El giro que introdujo Gardner en los 80 es que la inteligencia humana no es una esencia compacta de racionalidad lógico-matemática sino que se manifiesta al menos en 8 tipologías de inteligencias:

• Lingüística: lectura y escritura.
• Lógico-matemática: resolución de problemas e hipótesis abstractas.
• Espacial: hemisferio derecho más desarrollado con facilidad para presentar conceptos visuales.
• Musical: tanto en la creación como en la producción cultural en torno a la música.
• Kinestésica: talentos físicos alrededor de la coordinación motora.
• Intrapersonal: conocimiento de sí mismo y capacidad para enfocar hacia grandes metas. No debes confundir esta categoría con la inteligencia emocional, propia de otro marco teórico y que se caracteriza por el conocimiento y control de las emociones propias y ajenas, y no solo al interior del sujeto.
• Interpersonal: alto grado de empatía y buena relación con el entorno social.
• Naturalista: conectado con los procesos, ecosistemas y habitantes de la naturaleza.

Conocer las distintas inteligencias es la condición de posibilidad para poder reconocer en cada trabajador su potencial. Por su parte, sentirse valorado en lo que mejor sabe hacer aumentará su engagement y mejorará su desempeño. Si no conocías la teoría, es el momento de reconsiderar a las personas que tienes en tu equipo y asignarles tareas coherentes con su inteligencia. Por ejemplo, un perfil lógico-matemático no debería estar situado en atención al cliente, propio de la inteligencia interpersonal.

Úsalas para reconocer talento cualificado

Aplicarlas en el ámbito de recursos humanos para seleccionar talento cualificado es posible partiendo de otra de las claves que destacó Gardner: la inteligencia no es una cualidad innata sino que todas las capacidades están en potencia en las personas y hace falta disciplina, trabajo y esfuerzo para adquirirlas y desarrollarlas. Será desde el departamento de recursos humanos donde podréis enfocar a cada perfil para que optimice el tipo de inteligencia que predomina en su caso.

Gestionar un equipo diverso requiere que se propongan actividades y dinámicas desde distintos puntos de vista y orientados a visibilizar cada una de las skills correspondientes a las 8 tipologías de inteligencia. Así algunas se vincularán a la sociabilidad y el compañerismo y otras a la redacción de contenidos, por ejemplo. Si localizas cada potencial y le das su función, conseguirás aumentar notablemente la productividad así como el bienestar laboral.