Si quieres saber cómo implementar medidas de conciliación eficaces en tu organización, ahora que se está produciendo un relevo generación clave, sigue leyendo.

Porque nunca como ahora ha sido tan necesario encontrar el equilibrio entre la vida privada y la laboral debido a todos los cambios que se han ido produciendo en la actitud hacia el trabajo y la propia estructura de la familia.

Las medidas de conciliación como adaptación al cambio social

En el artículo 34 del Estatuto de los Trabajadores se recoge el derecho del trabajador a “adaptar la duración y distribución de la jornada de trabajo para hacer efectivo su derecho a la conciliación de la vida personal, familiar y laboral”.

La búsqueda del equilibrio entre las diversas facetas de la vida de las personas no es únicamente una necesidad individual de los trabajadores. Está en el centro de varios vectores de cambio social:

  • El paulatino reparto de las responsabilidades del hogar y cuidados entre hombres y mujeres. Las necesidades de conciliación de un varón eran mucho menores hace décadas, cuando la mujer permanecía en casa y asumía todas las responsabilidades.
  • La progresiva incorporación de las mujeres a puestos de alta responsabilidad exige que tengan las mismas oportunidades que sus compañeros masculinos.
  • La necesidad de atraer y retener talento femenino.
  • El cambio de mentalidad entre las generaciones Z y Millenial respecto al trabajo.

Todo ello cae dentro de las competencias del departamento de Recursos Humanos, ya que los beneficios para las organizaciones que apuestan por implementar medidas de conciliación son amplios:

  • Aumento de la productividad de los equipos.
  • Atracción del talento.
  • Reducción del absentismo laboral.

Pero, ¿Cuáles son las medidas de conciliación concretas que pueden ayudar a hacer realidad ese equilibrio?

1. Olvídate de las jornadas de trabajo clásicas

Una de las primeras y más eficaces medidas de conciliación es ofrecer a los trabajadores la posibilidad de adaptar su horario a sus necesidades personales, como pueden ser la entrada y salida de los colegios y el cuidado de personas mayores.

En la misma línea está plantear la libre elección de turno, en caso de que exista esa posibilidad en la empresa.

Concede flexibilidad a la hora de organizar la tarea y disponer libremente de las horas, los trabajadores no sentirán la necesidad de adoptar un perfil presentista y se aumentará su productividad.

2. Deslocaliza los puestos de trabajo

Desde hace mucho, la tecnología permite olvidar la imagen de un trabajador anclado a un escritorio y un ordenador donde desarrolla su labor. En las empresas donde la naturaleza del trabajo lo permita, los empleados pueden disfrutar de un modelo híbrido de trabajo.

Al poder disponer de períodos de tiempo de teletrabajo, ya sean determinados días de la semana o por épocas concretas del año, se cambia a una orientación por objetivos del desempeño.

Empleado disfrutando del tiempo libre junto a su familia gracias a las medidas de conciliación

3. Ofrece ventajas adicionales

Aparte del salario mensual que recibe el trabajador, entre otras medidas de conciliación, RRHH puede aportar una serie de beneficios extra que contribuirán a rebajar la tensión entre vida personal y laboral:

  • Ayudas directas al transporte.
  • Servicios de guardería para empleados.
  • Planes de pensiones.

4. Mejora los permisos que ofrece la ley

Los empleados tienen derecho a diversos permisos legales que la empresa está en posición de aumentar en función de las necesidades de estos. RRHH puede considerar alargar determinados períodos de permiso, como nacimiento, adopción, muerte de familiar, etc.

Pero también se puede conceder horas o días para determinadas necesidades no necesariamente previstas por las leyes, pero igualmente urgentes para los padres y madres.