Las estrategias de producción van más allá del comportamiento individual de un empleado. De hecho, casi la mitad de la mejora de la productividad se basa en el sistema. La estructura del modelo de negocio y la cultura corporativa son las claves para la transformación. Prueba con promover la formación en gestión del tiempo, visibilizar el estado de tareas de todo el equipo, organizar las reuniones y alinear la responsabilidad con la autoridad.
Estrategias de producción exitosas
La productividad de la empresa o el proyecto está directamente relacionada con la productividad individual. Y a la inversa. Había que decirlo y se dijo. Según la Harvard Business Review, es clave enfatizar que las personas no trabajan de manera aislada. Por el contrario, trabajan en organizaciones complejas definidas por la mutua dependencia. Estos ecosistemas necesitan mejorar sus estrategias de producción para mejorar finalmente los resultados.
Respetar el triángulo de hierro de todos los procesos y contar con un liderazgo de servicio, son los primeros pasos fundamentales. Pero hay otras estrategias eficaces si se implementan de manera armoniosa y coordinada:
- Diseña planes de formación para los trabajadores: no solo del contenido pertinente sino, sobre todo, de las técnicas de gestión del tiempo como el modelo Pomodoro o el Focus Keeper.
- Cuida el ambiente laboral y la motivación del personal. Un buen clima laboral mejora el desempeño y el rendimiento a nivel individual y estructural.
- Organiza las reuniones: limitando los tiempos, preparando el guión y eliminando las reuniones que no aporten valor. Escalona la secuencia de responsabilidades, y comunícala de manera clara para evitar los cuellos de botella.
- Distribuye y visibiliza el reparto de tareas. Los paneles de trabajo físicos o virtuales como Trello o Asana, en los que cada tarea se representa con una tarjeta que especifica quién la gestiona (y su estado), permiten una distribución más equitativa del trabajo.
- Alinea la responsabilidad con la autoridad. Con ello, además de mejorar la productividad, reducirás el estrés. Genera malestar cargar con la responsabilidad de las tareas a un trabajador, y luego limitarle o anular su autoridad para tomar decisiones al respecto.
Mejora la productividad implementando estos consejos
Ahora bien, del dicho al hecho, hay mucho trecho. ¿Cómo implementar estas estrategias en la empresa para mejorar la productividad? En primer lugar, es recomendable asumir el cambio en la cultura corporativa. Delegar responsabilidades y reforzar la autonomía de los trabajadores. Además puedes garantizar que funcione con estos consejos:
- Impulsa la innovación y la creatividad. Moderniza los procesos productivos aprovechando las herramientas digitales. Automatiza procesos y toma decisiones basadas en datos.
- Trabaja por objetivos apostando por la flexibilidad. Así además fortaleces el compromiso, retienes el talento y alcanzas equipos cohesionados.
- Dirige las estrategias hacia la mejora continua. El movimiento es la vida. Observar las oportunidades de mejora de la calidad y los tiempos, optimiza la producción.
- Escucha a la plantilla. Quienes están en primera línea tienen mucho que decir. El modelo de negocio debe ser un organismo vivo que se nutra de la interacción con su fuerza laboral.