La mayor parte del día, los trabajadores se encuentran en el desarrollo de sus actividades laborales. Por este motivo, contar con una oficina saludable es fundamental no solo por la comodidad, sino también para el aumento de la concentración y una mayor productividad.
Los profesionales que trabajan en una oficina saludable cuentan con mayores niveles de satisfacción, presentan una menor rotación, son menos propensos a las enfermedades y se encuentran más motivados.
Pequeños detalles para lograr una oficina saludable
Para conseguir una oficina saludable no hace falta hacer grandes inversiones. Con pequeños detalles se puede conseguir un lugar de trabajo sano y agradable. Estos son algunos de los aspectos a tener en cuenta:
Mobiliario ergonómico
Una mesa y una silla cómoda, hace que el trabajador no presente malestares, problemas de espalda o altos niveles de estrés. El profesional estará mucho más cómodo y será capaz de rendir en sus funciones laborales.
Plantas en una oficina saludable
Las plantas provocan una sensación de felicidad a las personas. Este pequeño contacto con la naturaleza es capaz de reducir los niveles del estrés y aumentar la capacidad de concentración, predisponiendo al trabajador a una agradable jornada de trabajo. Es necesario elegir plantas que no requieran de muchos cuidados, como la del aloe.
Calidad de aire
La limpieza no solamente abarca los mobiliarios, también en la calidad del aire que inhala el trabajador, un ambiente con poca concentración de CO2, puede optimizar el rendimiento y mejorar el estado de ánimo. Además, la higienización del ambiente elimina los patógenos, lo que resulta especialmente interesante tras la alerta sanitaria provocada por el Covid-19, al mismo tiempo que ayuda con la reducción de alergias.
Distribución de la estancia
Las oficinas abiertas invitan a la colaboración entre compañeros de trabajo. Además, de mantener una buena actividad física en los trabajadores, es recomendable contar con espacios amplios para una mejor distribución del mobiliario. Las áreas de esparcimiento, como salas de juego, gimnasio o estancias de descanso, mantendrán altamente motivados a los empleados.
Colores en las paredes
Los colores que se muestran en la zona de trabajo pueden afectar directamente al rendimiento laboral de los trabajadores, se recomiendan colores neutros y suaves, y una combinación de tonalidades equilibradas y armoniosas.
Iluminación natural
Sabías que, una oficina bien iluminada promueve un buen estado de ánimo y un ambiente más relajante, para ello se debe situar los mobiliarios lo más cerca posible a las ventanas, para recibir la iluminación natural del día. Si no es posible la iluminación natural hay que procurar que la iluminación artificial sea cálida y no excesiva, para no desarrollar problemas de visión.
Temperatura en una oficina saludable
Una oficina saludable logra mantener una temperatura entre 17 a 21º C, huyendo de los climas extremos del verano e invierno. De esta manera los trabajadores no enfrentarán ningún malestar o problemas de salud, optimizando su productividad y su concentración. Según una encuesta realizada a más de 100 trabajadores, se revela que una buena temperatura en el área de trabajo genera una gran satisfacción y una motivación para seguir trabajando.
Contaminación acústica
Para lograr una oficina saludable es necesario que no exista ningún ruido desagradable, ya que estos afectan directamente al bienestar y la concentración de los trabajadores, tanto como en el exterior y en el interior de la empresa. Esto es especialmente importante si la oficina es compartida, o se encuentra cerca de la sala de reuniones.
Alimentos saludables
Otro de los tantos aspectos de una oficina saludable, es la buena alimentación de sus trabajadores, cabe mencionar que dentro de una empresa, centro de estudios o centro comercial, se suele encontrar máquinas expendedoras, que por lo general poseen comida basura. Para ello se recomienda cambiar estas máquinas expendedoras por otras de alimentos más saludables en el trabajo, asimismo disponer de un dispensador de agua para los trabajadores.
Los trabajadores valoran muy positivamente trabajar en una oficina saludable. A las empresas, por su parte, también les conviene contar con lugares de trabajo que permitan que sus trabajadores disfruten de un excelente bienestar emocional y físico, logrando así, un mejor rendimiento y una mejor concentración.
