La Guardia Nacional de Louisiana, que se encuentra desde hace semanas levantando barreras en sus costas para evitar que el chapapote de la plataforma petrolífera accidentada en el Golfo de México alcance el continente, ha contratado los servicios de un trabajado muy especial. Su misión es bendecir a los operarios y atraer a los espíritus de sus ancestros para que les guíen en la colocación de de los diques.