Lo último que necesita una pyme o una persona autónoma es mucha burocracia para poder desarrollar su trabajo. Faltan manos y se agradece que este mayo hayan llegado a un acuerdo el Ministerio de Política Territorial y Función Pública con la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA). Desde el 2019 se lleva trabajando en un diagnóstico y evaluación de la situación que ha derivado en simplificaciones como buenas prácticas.

Reducir burocracia como buenas prácticas

Desde ATA inciden en el hecho de que la Administración debe de estar al servicio del ciudadano y no al revés. “Hacer trámites con la Administración no tiene que ser un muro. Las licencias de apertura y las municipales o que cada comunidad autónoma tenga una normativa diferente para una misma cosa siguen siendo un obstáculo para la actividad económica”, afirmó Lorenzo Amor, presidente de ATA. En otras declaraciones comenta que “la eliminación de trabas es para un autónomo tan o más rentable que bajar impuestos”.

Finalizada la vigencia del anterior convenio, el Ministerio ha considerado conveniente suscribir uno nuevo para seguir analizando la normativa y eliminar, cuando se identifiquen, trabas burocráticas. Entre las medidas valoradas positivamente por las pymes pueden citarse algunas relacionadas con mejoras en:

  • La Plataforma de Contratación del Estado.
  • La tramitación electrónica de procedimientos en el sector del transporte.
  • La interoperabilidad en los procedimientos de solicitud de ayudas del Programa Activa Industria 4.0.
  • La sustitución de autorización por declaración responsable en las distintas administraciones públicas.

La Unión Europea y la OCDE recomiendan a los Estados la mejora en la reducción de formularios y declaraciones, así como fomentar la simplificación de procedimientos administrativos y normativos. Especialmente, desde la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME) solicitan la reducción de burocracia para poder acceder a las ayudas directas. Su presidente, Gerardo Cueva, pide simplificar el procedimiento de solicitud “para no desalentar a las empresas de menor tamaño”.

Una de las agencias más señaladas es la Agencia Tributaria. Desde CEPYME también se solicita que facilite al máximo posible la tramitación para evitar demoras significativas en la recepción de las ayudas. Las otras entidades que mayor volumen burocrático han generado entre 2019 y la actualidad son Asuntos Económicos y Transformación Digital e Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

Menos burocracia y más transformación digital

De la mano del crecimiento exponencial y veloz del modelo tecnológico en las empresas y en las administraciones públicas, tenía que venir una adaptación y una transformación digital coherente para la gestión y coordinación entre ambos agentes. La Administración General del Estado (AGE) tiene la oportunidad de adaptar su funcionamiento a la realidad. Contribuye a impulsar el desarrollo económico y paliar los daños en el tejido productivo.

Dadas las limitaciones para las gestiones presenciales debido a la pandemia, el mercado único digital se ha posicionado como una prioridad. Tanto para la estrategia de recuperación como para las regulaciones de los trámites. Por tanto, es motivo de celebración contar con las herramientas tecnológicas adecuadas y la disposición de organismos públicos y privados, para reducir la burocracia y agilizar la producción de las pymes españolas.