El interim management es un modelo de contratación directiva externa en progresiva demanda en España. Se caracteriza por responder con soluciones concretas a un problema determinado en un periodo de tiempo concreto, es decir, encaja en el modelo de gestión de proyectos. Aporta valor por su experiencia y distancia respecto a la dinámica de la compañía. Sin embargo, un rasgo clave de este puesto debe ser su capacidad de liderazgo e influencia en el equipo.

¿Qué es el interim management?

El objetivo de esta contratación externa viene determinado por la flexibilidad de los costes y suele implicar la no permanencia en la empresa de este talento directivo encarnado en el interim management. Responde al modelo de contratación por proyectos y es tendencia. La duración media es de 6 meses a un año y los salarios oscilan entre los 600€ y los 2800€. La categoría corresponde a directivos especializados.

El interim manager aporta valor a la compañía con su experiencia, conocimientos y habilidades totalmente actualizados. Requisito imprescindible en los entornos VUCAH. La mirada externa ofrece la ventaja de deshacer un nudo, es decir, propone soluciones concretas a problemas bien definidos. Para lograr el éxito es responsabilidad de la empresa comunicar sin confusiones el objetivo de la contratación.

En cualquier caso, en España aún se está comenzando este camino pues se ve mayoritariamente como un “último recurso no deseado”, es decir, se suele juzgar como un perfil que no ha encajado de manera estable en ninguna compañía. Además, es clave diferenciar a un consultor del interim manager, que ostenta autonomía y autoridad para ejecutar las decisiones.

¿Qué es el interim management?

¿Cómo seleccionar este talento?

Las competencias y habilidades deseadas en un interim management son, además de los aportes técnicos y el valor sofisticado de sus soluciones, que tenga el don del liderazgo emocional y capacidad de influencia en las personas. Enfatizar el clásico “lado humano” en la gestión de proyectos puede ser la marca diferencial entre sobrevivir o fracasar en el desarrollo del negocio.

Otro de los rasgos que debes buscar en un interim management es la adaptabilidad a situaciones complejas y el control de cambios, combinado con una clara orientación hacia los resultados. Según la encuesta de la reciente AIME (Asociación Interim Management España), alrededor del 90% de los interim manager superan los 46 años, así que estás buscando un perfil senior y, hasta la fecha, representado en un 81% por hombres.

Algunos ejemplos de situaciones en las que la solución puede ser contratar a un interim manager son la sustitución de un directivo, procesos de integración en fusiones y adquisiciones, desarrollo estratégico de una línea de negocio o aceleración de la transformación digital, tan necesaria en la actualidad.

Por último, al incorporar este modelo de dirección, es muy importante transmitirle la cultura empresarial y que se implique en ella, así como en la dinámica de la organización. Del mismo modo que, para que esta pieza encaje en la estrategia corporativa es necesario contar con el apoyo de la dirección y comunicar claramente los roles asumidos al resto de la plantilla.