Un excelente currículum y una mejor presencia abren las puertas de cualquier empresa. El problema aparece cuando ni uno ni otra coinciden con la realidad y se sigue adelante con el proceso de selección. Este es el caso de uno de los personajes de la serie norteamericana «Cómo conocí a vuestra madre», Barney Stintson, para quien cualquier treta está justificada a la hora de conseguir un empleo.