La motivación laboral es clave para mantener una alta productividad y obtener los mejores resultados, pero para lograr equipos satisfechos hay que ir más allá de una buena política de incentivos. Muchas empresas se preguntan cuál es la mejor manera de motivar a un equipo, pero no hay un único tipo de motivación. Existen diferentes tipos que dependen de diferentes factores, y todos son válidos. Solo hay que estudiar cuál es el que mejor se adapta a las necesidades de la compañía y las características de nuestros profesionales.

Cómo mantener motivado a un equipo de trabajo

Las claves para motivar a un equipo de trabajo pasan por implementar la técnica de motivación laboral que hayamos elegido de forma correcta, ya que, igual que puede ser beneficiosa para la empresa, si se hace de manera incorrecta puede dar lugar a una pérdida de tiempo y recursos sin llegar a aportar ningún tipo de beneficio a la compañía y a los trabajadores. Así, entre todas las técnicas de motivación existentes, destacan las siguientes:

Motivación intrínseca

Es la motivación que permite que el trabajador se sienta realizado con la tarea encomendada. Se produce cuando al empleado se le dan las herramientas para desarrollar su actividad con el fin de que se sienta realizado, mejorando su motivación. Según los expertos es una de las fórmulas de motivación más poderosas, ya que si el individuo consigue automotivarse no necesita estímulos externos. Por eso, suele estar presente en los equipos de alto rendimiento.

Motivación extrínseca

La motivación extrínseca se suele asociar a un premio o recompensa por conseguir la finalización de la tarea encomendada con éxito. Este tipo de motivación es muy efectiva a corto plazo, pero puede que no satisfaga por igual al conjunto de trabajadores y, además, resulta muy fugaz, ya que tiene fecha de caducidad.

Motivación trascendente

La motivación trascendente es la más altruista y guarda relación con el sentimiento que experimenta un trabajador cuando un tercero se ve beneficiado. Es un tipo de motivación que puede aplicarse cuando se realizan actividades tanto en grupo como en solitario, pero siempre con el fin de lograr un beneficio para un tercero.

Cómo se consigue motivar a un equipo de trabajo

Dentro de las acciones para motivar a un equipo de trabajo, además de los incentivos económicos o recompensas materiales, existen otras fórmulas para lograr equipos satisfechos y un buen ambiente laboral.

Por ejemplo, dar más autonomía a los trabajadores y minimizar las políticas de control es una de las maneras más eficaces de motivación. Asimismo, también resulta muy útil ofrecer oportunidades de crecimiento, con el fin de que el empleado pueda seguir creciendo como profesional. Por último, muchas empresas se decantan por juegos y actividades para motivar a un equipo de trabajo que suelen realizarse en un entorno diferente al ámbito laboral, favoreciendo la motivación desde un punto de vista positivo e incluso divertido.