Aunque el autoconcepto y la autoestima tienen en común que determinan el modo en que se ve a sí misma una persona, debes saber que no son exactamente lo mismo.

A continuación, vamos a aclararte en qué se diferencian y te daremos algunos consejos para mejorar estos dos aspectos en tus empleados. Esto contribuirá a que se sientan mejor en su puesto de trabajo.

¿En qué se diferencian el autoconcepto y la autoestima?

El autoconcepto es cognitivo y hace referencia a cómo te ves a ti mismo. Es decir,  hace alusión a las características que consideras que te definen desde un punto de vista declarativo, sin entrar a juzgar si esto te parece positivo o negativo.

La autoestima, en cambio, sí que es un concepto emocional que responde a cómo te sientes contigo mismo y que nace de comparar tu autoconcepto con el «yo» ideal que tú mismo te has creado. En este sentido, dos personas pueden considerarse amables, lo que les haría coincidir en el autoconcepto que tienen de sí mismas, pero puede que una le dé a esta cualidad mucha más importancia que la otra, con lo cual tendría más autoestima.

Es importante que sepas que tanto el autoconcepto como la autoestima pueden ir modificándose en base a las experiencias vividas. Vamos a explicarte cómo mejorar la autoestima y el autoconcepto de tus empleados.

Autoconcepto y autoestima: qué son

¿Cómo mejorar la autoestima?

Las mejores maneras de mejorar la autoestima son:

  • Refleja confianza: Es importante que transmitas confianza a la hora de lidiar con tus empleados y que dejes ver que puedes ayudarles con cualquier asunto o problema que tengan.
  • Haz críticas constructivas: Por supuesto, tendrás que hablar con tus trabajadores cuando hagan algo mal. No obstante, no dejes de resaltar las cosas positivas. Recuerda que si solo les hablas de sus errores, podrías ejercer un efecto negativo sobre su autoconcepto y su autoestima y podrían terminando por sufrir un estrés y un malestar prolongados.
  • Diles en qué son buenos: Precisamente para reforzarlos, es importante que destaques sus virtudes y les hagas ver que tienen muchas aptitudes valiosas. Dales un feedback positivo de vez en cuando para recordarles las cosas buenas que aportan a la empresa.
  • Déjales crecer: Anima a tus empleados a que mejoren y aliéntalos a que progresen en su trabajo y a que continúen formándose y aprendiendo. Para muchos, sentirse realizados es fundamental para su autoestima, de modo que no descuides este aspecto.
  • Dales autonomía: Si estás demasiado encima de ellos y perciben que no confías en su trabajo se sentirán incómodos e inseguros. Dales espacio y hazles ver que eres consciente de su valía.

Estos son algunos de los puntos que has de considerar si quieres que tu equipo mejore su autoconcepto y su autoestima. Es importante que estés abierto a escuchar a tus empleados y que no te muestres serio y distante. Esto contribuirá al bienestar de todos los integrantes de tu plantilla y, por ende, tendrá repercusiones positivas en tu empresa.