¿Conoces el juego del teléfono escacharrado? Seguro que has jugado durante tu infancia. Por si no te acuerdas, te lo recordamos: consistía simplemente en que cada persona tenía que decir al oído de la de al lado un mensaje. Esto se hacía sucesivamente hasta que lo que había dicho la primera persona llegaba a la última y, normalmente, el mensaje final no tenía nada que ver con el inicial. Un divertido juego, ¿no?, pero ¿qué pasa si esto se hace realidad en tu empresa?
El teléfono escacharrado en la empresa
El teléfono escacharrado en la empresa se da cuando, por culpa de la mala comunicación, un mensaje se distorsiona hasta el punto de poder provocar problemas. Vamos a verlo con un ejemplo. Convocas una reunión y se lo comunicas por teléfono a los responsables de cada departamento. ¿Qué puede pasar luego? Hay quien entiende mal la hora, otros que piensan que se celebra en una sala que no es y alguna persona igual ni llega a escucharlo. ¿El resultado? Una reunión a la que faltan asistentes y que termina por retrasarse.
Este es solo un ejemplo, pero el problema del teléfono escacharrado puede afectar a cualquier proceso en el que la comunicación sea clave.
¿Qué consecuencias tiene este problema?
En primer lugar, hay que decir que va a reducirse la productividad porque el teléfono escacharrado hace que tus empleados procesen información errónea. Esto provoca que trabajen en una dirección incorrecta y que luego tengan que resolver los problemas derivados de esta mala gestión.
Por otro lado, la distorsión de la información puede llegar a provocar malentendidos y, de esta manera, generar conflictos entre los compañeros y con los jefes, de modo que las relaciones interpersonales dentro de tu equipo se puede ver dañadas. Por el bien de la empresa, esto es algo que debes evitar.
Incluso podría suceder que el malentendido llegara a afectar al consumidor y, con ello, tu compañía perdería un cliente.
Cómo evitar el teléfono escacharrado
Seguro que ya te has dado cuenta de lo importante que es velar por una buena comunicación interna para evitar este tipo de problemas. La buena noticia es que está en tu mano, ya que hay prácticas que puedes incorporar a tu trabajo y que ayudarán a evitar que la información se distorsione al pasar de una persona a otra.
En primer lugar, comunica las cosas importantes a todos y no solo a una persona que se ocupe de extender el mensaje. Por otro lado, es mejor que todo quede por escrito, ya que así existe la posibilidad de volver a comprobar lo que se ha dicho. Si tu empresa es grande, siempre tienes la opción de contar con una intranet mediante la que divulgarás todos los mensajes importantes.
Por último, haz que los empleados se sientan con la confianza necesaria para preguntar lo que no han entendido. Así evitarás que saquen conclusiones equivocadas.
Ya ves que una buena comunicación interna es fundamental para mantener una buena productividad y evitar conflictos en el equipo. Aplica estos consejos para no sufrir el problema del teléfono escacharrado.
