Preparar la entrevista es crucial para acertar con la selección de la candidatura que necesita la empresa en ese momento. Una de las opciones es la entrevista conductual o de comportamiento. Se centra en los aspectos psicológicos del aspirante, y se puede combinar con otros tipos de entrevista. Las preguntas giran en torno a sus habilidades técnicas, su capacidad de integración en la cultura empresarial y sus soft skills.
Prepara la entrevista conductual
Las preguntas que realizas en una entrevista conductual te permiten evaluar el desempeño de la candidatura. De esta manera, puedes profundizar en su experiencia anterior. Es frecuente que los criterios para tomar la decisión de contratar o seguir con el proceso de reclutamiento no salgan del CV o de la evaluación de las habilidades y competencias.
Algunas de las preguntas que necesitas responder para acertar con la selección son: ¿Es capaz de sostener las condiciones laborales? ¿Se adaptará al resto del equipo? ¿Tendrá una actitud entusiasta y adaptabilidad al cambio? Sin embargo, también querrás saber si han resuelto situaciones complicadas en el pasado o cuáles han sido sus mayores logros profesionales en los últimos dos años.
Lo más recomendable es elaborar una lista con las cualidades y requisitos del puesto. Así podrás adaptar las preguntas al proceso concreto. Puedes ordenar los contenidos alrededor de estos tres ejes:
- Habilidades técnicas: la experiencia es un requisito previo habitualmente, pero también es una cuestión de grado. “Ni calvo ni siete pelucas”, es decir, si la candidatura está hipercualificada es altamente probable que aumente el índice de rotación. Por ejemplo, puedes preguntar: Cuando te has enfrentado a un problema complejo a nivel profesional, ¿Cómo lo has abordado y cuál fue el resultado?
- Valores y cultura compartidos: con estas preguntas el objetivo es confirmar o rechazar la capacidad para encajar en la empresa. Saber más sobre su relación con otros compañeros o responsables anteriormente será información valiosa. Puedes sugerirle que piense en la persona más difícil con la que haya trabajado. Y le preguntas: ¿Hiciste algo al respecto? ¿Cuál fue el resultado?
- Actitud y soft skills: en una situación de empate entre candidaturas, el entusiasmo y resiliencia de una de ellas puede ser definitivo. Para saber más en este sentido, puedes preguntar: Cuéntame alguna situación en la que hayas conseguido empujar al equipo hacia un objetivo común. ¿Cómo lo conseguiste?
Complementa con otras entrevistas
El éxito de una entrevista depende de lo preparada que la tengas con antelación. Rentabilizar ese esfuerzo y el tiempo que empleas depende de la adecuada combinación de técnicas de distintos tipos de entrevistas. Si no, corres el riesgo de recoger la información que confirme tus propios sesgos o prejuicios.
El tipo de entrevista más eficaz para recursos humanos también depende del número de procesos de selección que realices, del sector al que pertenezca tu empresa y de la cultura interna y contextual. Sin embargo, en cualquier caso, la entrevista debe ser estructurada combinando el aspecto conductual con el situacional. Este último, refiere a las cuestiones sobre situaciones hipotéticas relacionadas con el trabajo, del tipo: ¿Cómo reaccionarías si estuvieras muy estresado por la carga laboral?