Existen multitud de métodos que están orientados a instruir y a entrenar a las personas que forman parte de una empresa y cuyo objetivo principal es el de apoyarlas en el desarrollo de sus habilidades y en la consecución de sus metas. Este conjunto de métodos se inscribe dentro de lo que se conoce como “coaching empresarial”, el cual puede dividirse en varias tipologías en función de las técnicas utilizadas y de las personas a quienes vaya dirigido. Tal es el caso del coaching motivacional, el coaching ejecutivo o el coaching ontológico.
¿Qué es el coaching ontológico?
El término ontología procede de la filosofía y está relacionado con el “estudio del ser”. De esta manera, el coaching ontológico tiene como objetivo la interpretación del ser humano, de su modo de actuar y de relacionarse y de su capacidad para alcanzar sus metas. Como veremos, esta modalidad de coaching no solo es positiva para las compañías sino también para la sociedad en su conjunto.
En lo que respecta al coaching ontológico aplicado a la empresa, hay que señalar que está muy relacionado con la psicología y que tiene como objetivo que tus empleados realicen un autoanálisis que les permita cambiar la forma de ver su mundo así como su manera de relacionarse con ellos mismos y con los demás.
Debido a todo lo mencionado anteriormente, las personas que forman parte de tu plantilla pueden llegar a ser mucho más conscientes de sus actitudes y aptitudes. Esto se traduce en unos trabajadores más satisfechos, que se conocen bien y que son capaces de alcanzar más eficazmente los objetivos organizacionales.
¿Cómo se aplica el coaching ontológico?
Existen diversas maneras de abordar este tipo de coaching en el ámbito de una empresa. Por un lado, para desarrollar el potencial de los profesionales, se recurre a sesiones privadas de coaching individual, así como a talleres grupales. En ambos casos, se ayuda a los participantes a definir sus objetivos personales y profesionales así como a autoanalizarse. Por otro lado, para desarrollar el potencial de la organización resulta muy útil el coaching de equipos (que tiene como objetivo identificar las fortalezas y errores del grupo) y el coaching de rol y liderazgo (para fortalecer las habilidades de gerencia).
¿Cuáles son los beneficios de recurrir al coaching ontológico?
Las empresas necesitan contar con métodos eficaces para afrontar los retos de una economía global caracterizada por una fuerte competencia. Para eso, ayudar a tus empleados a obtener sus metas resulta fundamental. El coaching ontológico puede ser muy útil en este sentido por los motivos que exponemos a continuación:
- Permite interpretar situaciones de una manera más clara.
- Facilita la integración de valores, talentos, intereses y aptitudes.
- Contribuye a perfeccionar las habilidades sociales y competenciales de los trabajadores.
- Elimina miedos, distracciones y barreras.
- Incide en la confianza, la productividad y la energía de los empleados, que a su vez ganan en satisfacción y autoestima.
Si quieres mejorar la inteligencia emocional y la autopercepción de tus empleados, el coaching ontológico es un aliado perfecto para conseguirlo. Recuerda que, si ellos mejoran, también lo hará tu empresa.