El benchmarking es una práctica de medición utilizada por las empresas para fotografiar y analizar elementos estructurales de la misma en pos de una mejora continua que impulse su nivel competitivo. Por tanto, hablamos de benchmarking de salarios cuando lo centramos en la estructura salarial de la empresa. El objetivo será establecer comparativas a nivel sectorial que generen compensaciones, equidad interna o mejore la retribución o la escala salarial de la compañía.
En qué consiste el benchmarking de salarios y cómo practicarlo correctamente
El benchmarking salarial es uno de los análisis cuantitativos más interesantes que pueden llegar a realizar las empresas. Consiste en hacer un estudio de la forma que tiene la estructura salarial de la empresa, y establecer una comparación con la de otras empresas del mismo tamaño, sector o nivel de facturación y tomar decisiones al respecto.
- Retención de talento: conseguir ofrecer a nuestros empleados y mandos intermedios niveles salariales acordes al mercado es vital para retenerlos en nuestra compañía.
- Rendición de cuentas ante el accionariado: ya que podemos justificar nuestra política salarial con argumentos objetivos y de competitividad.
- Equidad interna y potenciación de áreas o departamentos infravalorados: pues estos estudios pueden mostrarnos ciertos desequilibrios entre rendimiento y retribución
- Aumento de los niveles de competitividad: pues permite a la empresa equipararse con sus competidores
El benchmarking salarial suele ofrecer un desglose por categorías muy completo de toda la estructura retributiva de la empresa. Suele incluir el salario base, las diferentes variables, los incentivos y otros tipos de beneficios. Con estos datos, las empresas pueden alcanzar información relacionada con el salario mínimo o el salario medio de la compañía. O bien tomar decisiones relacionadas con aumentos salariales, políticas de compensación, cambios en las tarifas o en la estructura retributiva. Igualmente, respecto a la eliminación o incorporación de otros conceptos retributivos.
Cómo hacerlo y dónde encontrar este tipo de información
Las empresas suelen prestarse voluntariamente o recurrir a servicios externos del ámbito demoscópico, consultoras de desarrollo de negocio o que ofrecen servicios similares para participar en los informes de benchmarking salarial que suelen llevar a cabo anualmente.
La herramienta principal que se utiliza es una encuesta salarial individual por trabajador y puesto, donde se recoge información relacionada con el salario, las tareas, el número de horas de trabajo y otros ítems similares.
Una vez que la empresa ha realizado su propio benchmarking interno, llegará el momento del benchmarking competitivo. Es en esa fase cuando se compara la información de nuestra empresa con la estructura de salarios y retribuciones que practican otras compañías del sector, los competidores o los colaboradores directos.
El benchmarking salarial permite realizar comparativas entre un gran número de empresas. De esta forma, se pueden obtener conclusiones relacionadas con rangos máximos y mínimos de salario por categorías. También con el peso que tiene un determinado concepto retributivo o la composición de la estructura salarial de mandos intermedios y directivos, entre otros aspectos. Este es, sin duda, uno de los elementos más positivos ya que existen muchas dificultades para acceder a determinada información salarial cuando se trata de perfiles ejecutivos.