Las cosas suceden, de una manera u otra. Y quizás, por eso, decíamos ayer que hay que intrigar, cautivar, llamar la atención y ser originales. Estamos inmersos en un momento en que un currículo pasa desapercibido. En que la experiencia y la capacitación quedan a merced de una estadística, porque es mayor el número de personas que pueden desempeñar un mismo puesto de trabajo, o que se creen capacitadas para hacerlo.

Así que es necesario acudir a estrategias y estratagemas que nos permitan atraer a cuantas más personas mejor, para que se encarguen (ellas y no nosotros) de divulgar ideas originales y sugerentes.

Los códigos QR ya se han aplicado con éxito en campañas de marketing y por parte de algunas tiendas de ropa, y tienen mucho arraigo y tradición, como no, en Japón, donde ocupan el primer puesto en cuanto a utilización de gráficos bidimensionales.

Un Código QR puede esconder mucho detrás de su diseño. Y como os mostré en el anterior artículo, aplicando el tratamiento adecuado, es posible fusionar una imagen de fondo, retocar el código y personalizarlo, hasta el punto de poder realizar creaciones no demasiado complejas, que nos permitan obtener resultados muy interesantes.

Traigo a colación este tipo de simbolismos porque creo que vincular un documento, un enlace, una tarjeta de presentación, incluso un perfil en una red social. Pero también podemos hacer que se actualice de forma automática un perfil de cualquier otra red social.

En el caso que nos ocupa, azonmobile.com/qrcode-generator es un configurador bien sencillo de este tipo de códigos. Y dentro de su simpleza, nos permite, además, incorporar una imagen de fondo con el código QR obtenido, o incluso combinar esa imagen con el propio código para que la recorte y la use como icono.

Podríamos pensar que este tipo de elementos sólo pudiera interesar a los diseñadores gráficos.

Bueno, pensad que el resultado es una imagen que es accesible para cualquier persona.

Pensad que la mayoría de las redes sociales cuentan con elementos de divulgación que son comunes a todas ellas, como lo son los denominados muros. Y que en la actualidad, dichos muros permiten obtener una imagen proyectada del enlace que incluya dicho mensaje.

De hecho, los cambios aplicados recientemente en Facebook permiten incluso ver las imágenes ampliadas desde el panel lateral o Timeline, como lo ha venido a llamar Mark Zuckerberg. Pero en Twitter, desde hace tiempo, su columna de la derecha nos viene permitiendo ver las imágenes más recientes publicadas por un determinado usuario, y cuando seleccionamos un mensaje que incluye un enlace a una imagen, ésta de forma automática, se amplia y se deja ver por parte del usuario.

Así que ya tenemos dos elementos de peso que sostienen y apoyan la idea de aprovechar el poder de la imagen para la divulgación de todo aquel contenido que nos interese.

Se puede pensar que la gente no va a reconocer lo que dicho símbolo significa. Pero para eso está Google, su buscador, y su reconocimiento de imágenes automático. Esa fantástica herramienta que cuando se utiliza arrastrando a ella una imagen, te la identifica, la reconoce y te muestra otras de similares características.

En mi caso, pienso usar las imágenes QR para ayudar a quienes lo deseen en su búsqueda de empleo, gracias a un proyecto altruista que he puesto en marcha. Y que tiene su residencia en Facebook, como Tweet_Pub, y en Twitter, también como Tweet_Pub.

Porque cualquier ayuda es poca, y si se pueden aprovechar las redes sociales para ayudar a la gente es bueno hacerlo.

Qué os aproveche. Nos leemos pronto.

@AntonioVChanal
Coach, SMM y Profesor de Redes Sociales