Entre las técnicas de selección que más información ofrecen están, sin ninguna duda, las entrevistas grupales. Las dinámicas de grupo, las simulaciones o los role playing, son algunos ejemplos habituales. Observar a un candidato en una interacción con otras personas permite a los reclutadores descubrir actitudes o ciertas capacidades imprescindibles para el puesto. En este artículo, conoceremos algunos tipos y técnicas de entrevista grupal y cómo obtener el mejor resultado con ellas.
Entrevistas grupales: tipos y características más importantes
Para que una entrevista grupal nos ofrezca la información que queremos obtener de los candidatos en liza, antes debemos planificarla con tiempo y dedicación. En primer lugar, es necesario establecer el objetivo que queremos alcanzar. Es decir, definir qué tipo de características, capacidades, habilidades o aptitudes de los candidatos necesitamos evaluar.
Si contamos con el espacio adecuado y los medios humanos y materiales necesarios, una vez definidos los objetivos podemos escoger ya entre miles de técnicas de entrevista grupal existentes. Igualmente, podemos diseñar una entrevista grupal adaptada a nuestras necesidades particulares, así como al puesto en cuestión que estamos seleccionando.
Entre los numerosos tipos de entrevista grupal existentes, podemos destacar los siguientes:
• Brainstorming: en esta técnica, las personas deben aportar ideas, propuestas o soluciones a un problema planteado que, generalmente, tiene que ver con el puesto ofertado. Es muy utilizada al seleccionar puestos donde se premia y se busca la capacidad imaginativa y disruptiva, así como la iniciativa del candidato.
• Role Playing: una de las técnicas más conocidas y de las que ofrece más posibilidades, ya que se basa en la simulación de una actividad concreta y permite muchas variaciones y diseños propios. Es ideal cuando la empresa busca analizar cuestiones muy concretas en los candidatos postulados.
• Debate: aplicable cuando se busca evaluar capacidades de reflexión, comunicación e, incluso, liderazgo. Se puede plantear un asunto controvertido que afecte a la empresa y solicitar que una parte defienda una postura y la otra, justo la contraria.
• Mesa de trabajo: los participantes deben resolver una situación problemática como grupo o departamento real. Es muy interesante analizar los roles y las actitudes que adopta cada persona, así como la capacidad de liderazgo, el respeto a las ideas de los demás, la cooperación o su habilidad mediadora.
Claves para técnicos de selección en una entrevista grupal
Para poder valorar aspectos como la comunicación no verbal o la escucha activa, para analizar los diferentes roles de grupo o para detectar aptitudes técnicas o profesionales en los candidatos, el reclutador debe poder sacar el máximo partido de la entrevista grupal. Es decir, esta debe facilitar la retroalimentación.
Algunas de los aspectos que, como entrevistador, puedes tener en cuenta para conseguirlo, son los siguientes:
- Preparación de la entrevista: dimensionar el número de participantes, definir el tiempo de duración y los recursos materiales o humanos necesarios para llevarla a cabo antes de su realización.
- Definición de las normas de funcionamiento: una vez que los candidatos están preparados, hay que asegurarse que todos han entendido el objetivo de la actividad antes de comenzar con ella.
- Moderación y el control de la actividad: en algunas ocasiones, es importante guiar al grupo hacia el corazón de la entrevista o hacia aquellos obstáculos o situaciones en las que quiere observar desenvolverse al candidato. En otras, debes solicitar la participación de aquellos que hayan intervenido menos.
- La técnica de recogida de información: apuntar frases, actitudes, situaciones concretas o las decisiones de cada uno de los candidatos ante la dinámica planteada. También es posible utilizar tablas cuantitativas sobre su participación a medida que avanza la entrevista o, incluso, si los candidatos acceden, poder grabar la sesión.
Como decíamos, existen muchísimos tipos de entrevista grupal. Por ello, es conveniente escoger la dinámica que más se ajuste a lo que buscamos. Si la elección es correcta, la actividad contribuirá a reducir los costes y los tiempos del proceso de selección, y servirá como prueba definitiva en la toma de decisiones final.