El trabajo híbrido es una de las demandas de los trabajadores tras el teletrabajo impuesto por la pandemia. Una de las dificultades que encuentran algunas empresas para implementar la jornada mixta es el control de horarios y rendimiento. La transformación digital acelerada por la crisis sanitaria, sin embargo, ha puesto al servicio de los departamentos de recursos humanos soluciones informáticas y estrategias que lo facilitan.
¿Cómo se puede hacer el seguimiento del trabajo híbrido?
En un entorno de trabajo híbrido, la gestión del talento debes pensarla tanto en espacios analógicos como virtuales. La entrega del feedback en ambas direcciones, en tiempo real y de manera periódica es clave. Es importante que el trabajo presencial se limite a las actividades relacionales y de coordinación. Para estructurar el seguimiento es recomendable:
- Centralizar la información. Aprovecha las ventajas del cloud computing.
- Monitorizar la actividad. Es recomendable además realizar reuniones uno-uno, de tal manera que cada trabajador pueda manifestar sus dudas o necesidades concretas. Así disminuyes las posibles resistencias al cambio.
- Fijar metas periódicas. Además del control horario, fija las KPIs para gestionar el rendimiento en función de los objetivos alcanzados.
- Incentivar la evaluación constante. Así podrás identificar con agilidad las brechas y oportunidades en los procesos. Además, con ello desarrollas la autonomía de la plantilla, que será más consciente del ecosistema empresarial.
- Automatizar procesos. Tanto para la recogida de la información como para el procesamiento de datos. Cuanto más claros y expandidos sean los canales de comunicación, a ser posible 360 grados, más eficaz será el seguimiento.
Cada vez más empresas, como por ejemplo la compañía de seguros Generali, incorporan una compensación económica para los trabajadores que asumen la jornada híbrida. Además asumen los costes de la parte proporcional de los suministros al desarrollar la actividad en las casas de los empleados. Activan además la posibilidad de ser nómadas digitales, es decir, trabajar desde otros lugares que no sea la residencia. Para ello es necesario asegurarse de las óptimas condiciones de conectividad y seguridad, así como comunicarlo previamente.
Más ideas para controlar las jornadas mixtas
Los departamentos de recursos humanos tienen muchos retos y oportunidades de cara a mantener la plantilla cohesionada en este modelo de trabajo híbrido. Por un lado, la presencialidad generaba espacios de encuentro espontáneo en el lugar de trabajo que hay que desarrollar. El metaverso y las opciones digitales posibilitan reuniones virtuales con una experiencia cada vez más cerca de las analógicas.
Sin embargo, hay otras cuestiones que no necesitan inversión ni digitalización. Por ejemplo, puedes organizar los horarios de ocupación de la oficina con dinámicas de intercambio que enriquezcan la mera operatividad de las reuniones. También puedes planificar la evaluación del desempeño por objetivos sin necesidad de vigilar el horario.
En cualquier caso, lo que sí debes liderar es que haya una excelente transmisión de la cultura empresarial. En el entorno del trabajo híbrido, la cultura organizacional compartida se convierte en el factor principal de cohesión. Además, aumenta el sentimiento de pertenencia y optimiza el rendimiento. Realiza acciones de comunicación interna y proyecta planes de acción donde la plantilla se implique.