¿Cuantos días de permiso tiene un trabajador cuando es padre o madre? Esta es una de las preguntas que se hacen los trabajadores cuando están a punto de tener un hijo y coger la baja por maternidad o la baja por paternidad, y que en este post detallaremos.
Tanto las empresas como los trabajadores, tienen derechos a la hora de gestionar sus bajas por maternidad y paternidad, llamadas también prestación por maternidad o paternidad. Es importante que los trabajadores de RRHH sepan gestionar este tipo de bajas con la finalidad de poder garantizar una estabilidad familiar y laboral y poder cubrir la baja del trabajador sin ningún inconveniente.
¿Qué duración tienen la baja por maternidad y la baja por paternidad y qué características tienen?
La baja por maternidad tiene una duración de 16 semanas desde el día del nacimiento del bebé y la prestación por paternidad consta de 1 mes. Los padres podrán disfrutar de la baja de los padres de manera fraccionada, es decir, podrá trabajar media jornada y así alargar la baja. Los demandantes de la prestación por paternidad y maternidad cobrarán el 100% de su salario, tanto si son autónomos como empleados.
¿Quién puede beneficiarse de este derecho?
Todos los trabajadores que cotizan en la seguridad social tanto mujeres y hombres, las bajas no son dependientes, por lo que el padre puede disfrutar durante dentro de las 16 semanas de baja maternal o bien inmediatamente después del parto.
¿Qué beneficios obtienen las madres?
Una vez finalizadas las 16 semanas, las madres que se incorporan a su puesto de trabajo tienen una hora diaria para lactancia, que permite a las madres estar en contacto con sus hijos. También, una madre puede decidir trabajar media jornada (adaptándolo a cada tipo de contrato) hasta que el niño tiene 8 años.
Y los padres, ¿qué beneficios tienen?
Cuando los 28 días días de baja paternal se han acabado, el padre se incorporará a su trabajo de forma habitual pero podrá pactar con la empresa ciertos beneficios como salir del trabajo si su hijo se pone enfermo o pactar una posible reducción de jornada.
Las empresas tienen la obligación de mantener el puesto de trabajo que tanto el padre como la madre ocupaban antes de pedir la prestación, puesto que es un derecho que tienen los trabajadores.
Para empresas que tienen un tamaño pequeño o mediano, les puede resultar más difícil cubrir la vacante ya que pueden no tener tantos recursos como una gran empresa. Aunque pueda resultar difícil, las empresas han de cubrir el puesto de la persona ausente o bien repartir recursos para que no se note la ausencia en mayor medida y puedan funcionar con normalidad.
Los empresarios han de respetar las necesidades de las madres durante el embarazo y posteriormente, ya que es un período de adaptación para ambos y se ha de llevar de la mejor manera posible para encontrar el equilibrio para la madre y la empresa.
A medida que el niño vaya creciendo, la estabilidad laboral también aumentará, puesto que el padre o la madre podrán ser más independientes y dedicar totalmente su jornada laboral sin tener interrupciones.
Para las empresas siempre resulta un proceso algo más dificultoso, puesto que han de cubrir la vacante de la persona que se va a ausentar durante unos meses y tienen que formar al futuro sustituto de la persona que va a desempeñar sus labores. La clave para que este proceso resulte un éxito es establecer el período de baja y tener tiempo para formar al suplente y que este se pueda adaptar a su nuevo trabajo.