Hay dos afirmaciones sobre el mercado laboral que no escapan a nadie: que la situación es realmente complicada y no se vislumbra una salida a corto plazo, y por otro lado, que el conocimiento de idiomas se hace fundamental en un mundo cada vez más globalizado.
El inglés es el idioma más requerido en las ofertas de empleo (en un 86% según el Informe Infoempleo 2011), seguido por el francés y el alemán, sin embargo hay otros idiomas más “minoritarios” que te pueden abrir muchas puertas. El chino es uno de los que más futuro tiene pero su complejidad se convierte en un obstáculo en muchas ocasiones. Otra opción con muchas posibilidades, y quizá más asequible, es el portugués.
El portugués es hablado por más de 200 millones de personas y es lengua oficial en países como Angola, Mozambique, Guinea Ecuatorial, Cabo Verde y Sao Tomé y Príncipe, pero sobre todo en dos sitios estratégicos: Macao, la puerta de acceso a China, y en Brasil, uno de los países más emergentes del momento.
Se calcula que en los próximos años, Brasil pasará de ser la séptima economía mundial a la quinta, adelantando a Francia y Reino Unido. Además, el país sudamericano albergará la Copa Mundial de Fútbol de 2014, así como los Juegos Olímpicos de 2016, lo que generará interesantes oportunidades de empleo y negocios.
Si quieres desmarcarte y aprender un idioma que pueda facilitarte el acceso al mercado de trabajo, el portugués es una gran opción. La oferta formativa es muy amplia y adaptada a todas las posibilidades.
Mercados emergentes como Brasil son la gran baza para profesionales de sectores que en España no tienen ninguna oportunidad laboral como la construcción. Aprender Portugués no es demasiado difícil y puede acercar oportunidades laborales a muchas personas con alta movilidad.