El macroentorno de la empresa lo constituyen los factores externos que afectan a la actividad de la compañía, pero sobre los que esta no tiene ningún control. Véase, la pandemia. Como no se puede modificar o resulta muy difícil hacerlo, la estrategia empresarial es adaptarse al macroentorno, jugar con sus reglas, y sacar el mayor partido. O, al menos, salvaguardarse de los riesgos que entraña para su estabilidad.
Este concepto se empieza a emplear en los ochenta del pasado siglo, cuando la estructura empresarial se concibe como un ente orgánico que se desenvuelve en un medio y que evoluciona con el tiempo, como un ser vivo.
Ya vimos hace un tiempo cuáles son los factores que determinan el macroentorno. Desde las características de la población, el sistema político y los condicionantes que regula la normativa de los Estados donde operan las compañías hasta los niveles económicos, sociocultural, así como los agentes ambientales que puedan afectar a la actividad empresarial.
Qué factores del macroentorno inciden en la actividad de la empresa
Los primero que conviene detectar son los condicionantes porque son los que más hacen peligrar la integridad del negocio. Si uno o varios agentes externos a la empresa están afectando a su desarrollo, detectarlos va a ser el primer paso para poder hacerles frente. Es muy posible que si entorpece a la actividad de tu empresa esté determinando también la de otras empresas del sector. Investigar en las estrategias que otros han empleado para salvar los daños puede ayudarte a desarrollar una especialmente adaptada a tu compañía. Lo mismo sucede con los factores que favorecen la actividad, encuentra la inspiración en modelos que hayan aplicado otros negocios para sacarles partido adaptándolos a tu negocio.
¿Cómo se prevé la evolución de los distintos factores?
Encontrarás información sobre las previsiones de tu macroentorno en estudios e informes sobre el sector en el que se enmarca tu negocio. Estar al día de las noticias que se van produciendo en este ámbito puede ahorrarte muchos disgustos. Si eres capaz de prever el macroentorno de tu empresa sobre la base de los datos que recibes, podrás elaborar estrategias preventivas para mantenerla. Aún así, es frecuente contar con la ayuda de consultorías externas para este cometido.
¿Hay asociaciones para hacer frente común a una causa?
Cuando hay factores comunes que afectan a un mismo grupo de empresas, suele generarse una asociación o comunidad que responde con más fuerza como colectivo que de manera individual. Por ejemplo, durante la pandemia, las empresas culturales son una de las muchas afectadas por las restricciones presenciales frente al contagio. Se han iniciado varias vías para llamar la atención de las instituciones y que prevean medidas que salvaguarden la continuidad de estos negocios.
¿Qué tecnologías ayudan a sacar partido o a protegerse del macroentorno?
Hoy día hay tecnologías que están transformando la manera de concebir cantidad de actividades empresariales, no solo las que tienen más que ver con el mundo digital o tecnológico. Algunas de las más comunes son las siguientes: blockchain para el envío y recepción de información completamente cifrada y segura, lo que repercute en certificaciones y validaciones de procesos; inteligencia artificial unida a aprendizaje automático y a Internet de las cosas, para generar aplicaciones y funcionalidades que sirven para mejorar servicios y beneficiarse de completos reportes sobre la interacción de los usuarios; impresión aditiva y 3D, que está consiguiendo abaratar costes de producción y prototipado, o todo tipo de nuevos materiales y utilización de energía a partir de las renovables, lo que permite una producción más sostenible para el planeta y que cumple mejor con la normativa impuesta desde las instituciones.