Juana M. Fernández Martín del Campo, directora de Gestión del Capital Humano de Gamesa Corporación Tecnológica

Hace algo más de un año, el por entonces aspirante demócrata a la Casa Blanca Barack Obama visitaba la sede de la empresa española Gamesa Corporación Tecnológica en Fairless Hills (EE.UU.) en una declaración de intenciones por las energías limpias y los llamados ‘green jobs’ o empleos verdes. «También nos visitó Hillary Clinton», recuerda Juana M. Fernández Martín del Campo, directora general de Gestión del Capital Humano de esta corporación dedicada a la energía eólica que cuenta con unos 7.200 empleados en todo el mundo.

Además de las visitas y los reconocimientos, en Gamesa siempre que pueden pasan a la acción. El pasado 25 de junio la compañía participó en un foro sobre sostenibilidad social como llave para la recuperación económica organizado por las Naciones Unidas.

Gamesa tiene nombre propio dentro del concepto de los «green jobs», un movimiento propiciado por ecologistas y sindicatos que se refiere no sólo al impulso de los empleos en sectores verdes, sino también a empleos de calidad. «En 2008 nos otorgaron el premio Eleanor Roosevelt Human Rights por los esfuerzos en la protección de los trabajadores; fuimos incluidos entre las empresas de la Labor Day List, que son reconocidas por compatibilizar beneficios con protección laboral, y, por último, somos la única eólica de primer nivel en la Green Jobs Initiative».

¿Qué parte de «culpa» tiene la gestión de los recursos humanos en esta fama? Lo que nos ha hecho tener un nombre propio es nuestra voluntad y capacidad para crear, en nuestras plantas de EE.UU., un marco de relaciones y diálogo con los sindicatos, algo que allí no es nada común.

Además de en EE.UU. están presentes en China, Europa, el norte de África, ¿cómo se afronta esta diversidad? Las culturas son totalmente diferentes, pero tenemos equipos de recursos humanos locales que adaptan los procesos a cada región desde el punto de vista legal y desde el uso y la costumbre. Sin embargo, hay una serie de herramientas -formación, encuentros, boletines internos…- que promueven nuestros valores corporativos.

La seguridad se encuentra entre esos valores… Es nuestra prioridad, lo llevamos en el ADN de la empresa. El año pasado todo el mundo -fábricas, parques y oficinas- tenía como objetivo la salud y seguridad laboral.

Las renovables crearán 20 millones de empleos hasta 2020 en todo el mundo, y en España podría significar 135.000 nuevos puestos en el próximo año. ¿Cómo viven este reto? Ese reto comenzó en 2006, con el nuevo plan de negocio. Sólo en 2007 tuvimos 1.525 altas netas… Por ello, la formación y la selección son esenciales.

En 2009, ¿seguirá ese crecimiento? Tras crecer tan rápidamente nos encontramos en una etapa de consolidación. Las búsquedas serán para puestos concretos: ingenieros de ventas, compras y calidad.

En esa consolidación, ¿cómo cuidan a sus equipos? Según la Encuesta de Opinión de Empleados, sobre 4.482 trabajadores, el mayor índice de satisfacción tiene que ver con el puesto. Todos trabajamos por y para la sostenibilidad social y medioambiental. Y desde Gestión del Capital Humano lo reforzamos.