Da vértigo la velocidad con la que se está transformando todo a nuestro alrededor. La crisis ha acelerado, entre otras muchas cuestiones, el debate sobre el sistema productivo de nuestro país. Las empresas deben impulsar nuevos modelos de negocio, buscar nuevas fórmulas de financiación, maneras de incrementar laproductividad, innovación o competitividad. Por otro lado los trabajadores nos enfrentamos a un nuevo mercado laboral caracterizado por la aparición de nuevas profesiones, donde la cualificación requerida es cada vez mayor, más flexibilidad horaria y geográfica, una mayor competencia y “otras formas” de contratación con las empresas.
Teniendo la crisis económica como escenario, podríamos decir que los principales motores que están propiciando éstas transformaciones a nivel empleo y empresa son: la globalización de la economía, los cambios sociales y culturales y las nuevas tecnologías de la comunicación.
La Globalización de la Economía
Cualquier negocio, por pequeño o local que sea, y de la misma forma cualquier trabajador se va a encontrar con mercados globales que cada vez están más cercanos. Las empresas se preguntarán si es más rentable contratar con proveedores de su zona o con los de otros países y, a la vez, la posibilidad de llegar a clientes de otros países; al mismo tiempo se van a enfrentar a una mayor competencia entre los clientes de su país ya que estos podrán acceder empresas foráneas. Además en este proceso aparece la deslocalización internacional de las empresas y la externalización de servicios, incluyendo empleados. Los trabajadores en esta coyuntura deben estar capacitados para trabajar en empresas de cualquier país, en algunos casos desplazándose y en otros “tele-trabajando”. También deben ser más flexibles en sus funciones y su horario y su capacitación debe ser mayor para competir con trabajadores de todo el mundo, o incluso trabajar de forma externa.
Cambios Sociales y Culturales
Los cambios que se están produciendo en la sociedad, ya sean culturales, demográficos o políticos influyen directamente en el mercado económico y laboral. Estamos viviendo momentos en los que la longevidad y la calidad de vida es mucho mayor a otros periodos históricos. Debido a la crisis estamos más concienciados de la importancia de la solidaridad, la responsabilidad social o el comercio justo. También hay un cambio en los valores hacia una vida familiar que debe conciliarse con el trabajo, cambios de roles entre hombre y mujer, mayor valoración del tiempo libre, mayor inquietud por viajar y conocer otras culturas, etc. Tanto las empresas como los trabajadores, sea cual sea su modelo en el futuro tendrán que adaptarse a estas cuestiones.
Las nuevas tecnologías de la comunicación
En general cualquier cambio tecnológico es importante tanto a nivel social como empresarial. En la actualidad ese cambio está siendo impulsado por las TIC. Cualquier aspecto del ámbito digital tiene un enorme impacto social, las llamadas redes sociales están cambiando la forma de relacionarse las personas y por ende los mercados y las empresas, donde la persona individual adquiere una dimensión que anteriormente no tenía. Las comunicaciones facilitan la economía internacional a través de nuevas formas de comercializar productos sirviéndose del comercio electrónico… que a la vez es más social. Estas tecnologías a la vez están fomentando la innovación y mejorando la competitividad de las empresas, con la aparición de negocios antes impensables. Los trabajadores con estas tecnologías tienen una mayor capacidad de “tele-trabajar” o emprender y ofrecer sus servicios a empresas de todo el mundo, la posibilidad de formarse mucho mejor, asociarse y colaborar con otros trabajadores.
El auge de los consultores de negocio
Sin duda, los tiempos están cambiando y las empresas tienen que adaptarse. Van a tener que cambiar sus modelos de negocio, la forma de organizarse, la manera de relacionarse con el exterior y con sus propios empleados, buscar nuevos nichos de mercado, saber dónde encontrar a los mejores trabajadores… Y los trabajadores tienen que entender que están ante una oportunidad única para encabezar el cambio y guiar a las empresas. Una oportunidad de formación es la de consultor en negocios. Sin duda se trata de una de las profesiones en auge con más futuro.
Información Bitacoras.com
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Estimado foro
Esto de cambiar las estructuras, costumbres y procesos de trabajo, de trabajar, de emplear y sobre todo de incrementar ventas, produccion, mercados etc no deberia ser algo nuevo.. La estabilidad de un negocio o empresa esta en llegar hasta un punto o nivel de estabilidad…Sin embargo ese punto o nivel no es inamovible…La competencia, los clientes que buscan otros productos, otras alternativas, las empresas similares o analogas de otros paises estan pendientes siempre de captar mas mercado y no andan tan cautas pretendiendo encasillarse en una zona, rubro de venta, mercado cautivo etc….Hoy dia eso de mercado cautivo, fidelidad del cliente a la marca etc ha variado por una constante busqueda y hallazgo de nuevas opciones y alternativas….Segun esto en que lo unico seguro y estable es EL CAMBIO tenemos que pensar en que debemos enfrentar las variables actuales, crecer y desarrollarnos mas aun o quedarnos en la estacada….En el caso especifico de la generalidad de los Empresarios Españoles es IMPORTANTISIMO que entiendan que a donde deben crecer es HACIA EL EXTERIOR de España…El mercado Internacional es mas competido y mas dificil y requiere un mayor esfuerzo tanto economico como de horas..Mucha paciencia, mano zurda, tolerancia y sobre todo SABER IDIOMAS…Pero no es cuestion de hablar o chapurrear un idioma extranjero, es tambien entender su psicologia, sus costumbres comerciales, sus modos y formas, sus reglas de educacion etc…No podemos pretender llegar a un Tailandes y hablarle en Ingles de unos churros con chocolate porque primero le hablaremos en un idioma que no es el suyo, sobre un tema que no conoce de un extranjero que le habla desde muy lejos….Para abrir nuevos mercados hacen falta personas con idiomas, capaces, que esten dispuestas a viajar un fin de semana, a demorar sus vacaciones. a plantarse en un cliente hasta lograr que le atiendan o le den una respuesta positiva, amigable, abierta, autonoma en decisiones y sobre todo con una clara idea de negocio y del marco legal y moral que le rige . Esta persona no se contrata por un misero sueldo o a destajo o le pagas por comisiones cuando estas se cobren…Este profesional que sera mas que un empleado,. sera un aliado y un explorador de mercados no puede estar preocupado por no tener dinero para pagar el alquiler o la multa que le pusieron visitando a un cliente..Este profesional debe estar motivado y enfocado a convencer, persuadir y sobre todo establecer relaciones con todos las empresas que contacte porque mientras mas el vea o visite mas posibilidades habran de poder vender ..Y vender bien, entregar bien y mantener un servicio..Para que se pueda volver a vender….
Hola Ivan,
Sin duda el cambio es una variable que está ahí y forma parte de la propia naturaleza de los negocios, sociedad, cultura y economía. También estoy contigo en el valor de las personas para cualquier empresa, y añadiría algo más, las personas son la razón de todo: de las empresas, de la economía, del mercado, de los bancos, etc. Si salvamos estás estructuras a costa de las personas nada tiene sentido, es un absurdo.
Sólo quiero añadir una reflexión a tu comentario, el cambio es inevitable y necesario pero debe ser gestionado e intentar que se acople a la realidad socio-económica. Por eso hace falta que haya profesionales que sepan como ayudar a las empresas a definir que quieren ser y cómo van a hacer negocios. Este cambio debe enfocarse desde un punto de vista estratégico y global, no exclusivamente un «¿cómo puedo ganar más dinero?» Si te centras únicamente en este objetivo más temprano que tarde la empresa cerrará.
Y me explico. Una empresa tiene que «ganar dinero», por su puesto, pero esto no va a depender únicamente de parámetros de «margen o competitividad», tiene mucho que ver en cómo la empresa es capaz de relacionarse con sus mercados, con sus empleados, con sus proveedores, con su competencia, con sus clientes, y en definitiva con la sociedad en general.
Esto lo digo porque hay empresas diseñadas para ganar dinero y morir, son efímeras y no aportan nada. Por ejemplo las que saturan el mercado con «almohadas ergonómicas» hasta que la demanda desaparece. Son empresas que establecen una guerra con su competencia, buscan el margen de beneficio en todas sus acciones, son muy agresivas con su competencia y su entorno, se olvidan de todo lo demás. Estas empresas no aportan nada.
Otras empresas están diseñadas para existir a largo plazo, su naturaleza es ser útiles a la sociedad ( vamos «cuidar la mano que les da de comer»), construyen una personalidad y unos valores propios y cuentan con un conjunto de profesionales que deben estar satisfechos porque en definitiva son su «familia». Estas empresas hablan con su mercado, invierten en innovación, formación y en la sociedad, crean vínculos con su competencia y sus proveedores, procuran ser respetuosas con las personas y el medio ambiente y, todo eso, lo hacen produciendo y dando beneficios. Esas son las empresas que necesitamos, las que estos profesionales tienen que construir adaptándolas al cambio pero en armonía con el ecosistema socio-económico, cultural y humano. Sin duda estas empresas sobrevivirán a cualquier crisis.