La economía española se ha estancado y el crecimiento es nulo, según ha reconocido el Banco de España. Con un mayor retroceso del empleo y del PIB, el consumo de los hogares sigue disminuyendo, lo que lleva a muchas empresas a realizar despidos o, incluso, a echar el cierre. El trabajador no vive uno de sus mejores momentos y la situación económica influye no sólo en su trabajo, también en el ambiente laboral.

Para contrarrestar esta situación, los departamentos de Recursos Humanos se convierten en una pieza clave. Aranzazu Salguero Cruz, directora de RR.HH. de la empresa alimentaria Mars España, comenta algunas de las herramientas con las que cuenta su empresa para mejorar la motivación. «Hacemos encuestas de clima laboral, de satisfacción o programas de sugerencias. Identificamos la motivación de nuestros empleados para desarrollar programas dirigidos a trabajar las áreas de mejora. Los más habituales son aquellos enfocados a crear equipo y fomentar el sentimiento de pertenencia a la compañía, a crear equilibrio entre su vida personal y  laboral o los de salud. También son importantes los programas que ayudan a tener una actitud más positiva y generan y contagian el optimismo o los que ayudan al desarrollo  de competencias o habilidades, como los de «coaching individual o grupal».

Enrique Jurado, socio y director de D’Arte, empresa especializada en «coaching» empresarial, asegura que lo más importante para mejorar la motivación de los empleados es «tener sentido común. Los empleados  quieren que se les reconozca por lo que hacen. Necesitan sentirse valiosos. Sin embargo, muchas empresas y sus líderes desconocen estos recursos y no los emplean. Las herramientas que tienen las empresas para motivar a sus empleados son tan simples como la escucha activa, reconocer los valores y propósitos de cada persona, promover  la cultura de ayuda y el liderazgo al servicio de la empresa, desarrollar la cultura de la calidez y cercanía, y  permitir y aplaudir el intento de mejorar las cosas, premiando su proactividad».

Enrique Jurado asegura que «las empresas que realmente son proactivas ayudan a sus empleados a que se genere un buen ambiente laboral, una cultura empresarial donde los valores, la misión y la visión de la compañía no se muestre como un mero póster que nadie cree, sino que sea una realidad».

Buenas prácticas

Cuando comenzó la crisis en España, en ING Direct comunicaron a todos los trabajadores, de forma clara y directa, que su empleo estaba asegurado en condiciones normales y que mantendrían las mismas ventajas y beneficios. Fernando Córdova, director de RRHH en la entidad, señala que «es importante tener una buena comunicación con los empleados. Les hicimos  partícipes de las distintas iniciativas para sobrellevar esos momentos y, por ejemplo, invitamos a todos los profesionales a dar ideas que contribuyesen al banco a controlar los costes». Córdova afirma que «el mensaje a  comunicar debe incluir  la visión a corto y medio plazo para que los profesionales se sientan parte de ella. Ha de transmitir un sentido de urgencia y sensación de oportunidad que movilice la energía de la gente, que los profesionales vean el cambio como necesario de cara a nuestra visión y objetivos y que les genere ilusión por el proyecto, por las  oportunidades y desafíos que inspira».

Como en todas las empresas y ante la situación económica que vivimos en España, ha habido momentos de incertidumbre entre los empleados de Bain & Company, pero el mensaje que trasladaron fue clave. «Bain no existiría si no es por sus empleados, y todos ellos, sin importar su posición, son igualmente importantes para la empresa, por lo tanto no se puede prescindir de ninguno». En la consultora se sigue contratando personal a pesar de la crisis. «Este año la plantilla se ha incrementado en un 10%, lo que demuestra que seguimos confiando en nuestro activo principal, las personas», señala Eduardo Giménez, de Bain &C ompany.

Sí a la conciliación

En Procter & Gamble, empresa que encabeza las listas de los mejores lugares para trabajar, están comprometidos con la motivación de sus empleados. «Apostamos por la retención del talento, la diversidad, la formación y el  desarrollo continuados. Todo ello contribuye a que nuestros profesionales estén motivados, porque sienten que pueden progresar y crecer en la compañía. Les ayudamos a equilibrar el desarrollo de la carrera profesional  con la vida personal y familiar y disfrutan de programas de asistencia con los que sobre llevar mejor las gestiones cotidianas», comenta Francesca Sagramora, directora de RRHH de P&G para España y Portugal.

La multinacional estadounidense Kellogg ha diseñado el modelo de trabajo «KWork», que busca fomentar la conciliación laboral y personal dando la posibilidad de trabajar desde cualquier lugar y con flexibilidad horaria.  Todo ello gracias a un buen uso de las tecnologías y un enfoque holístico: espacio y tiempo. Nuestro modelo de trabajo responde al compromiso de la compañía de ser un ‘gran lugar para trabajar’, con el que hemos reducido la complejidad en la gestión de infraestructuras y nos hemos posicionado como un ejemplo de sostenibilidad», declara Susana Gómez, directora de RRHH de Kellogg Iberia.

Kellogg cuenta con programas de desarrollo a nivel europeo en los que  participan los 400 empleados que hay en España. «Permiten disponer de un diagnóstico detallado de las mejoras, debilidades y acciones diseñadas para desarrollar competencias para áreas determinadas de la compañía, como marketing o ventas», destaca Susana Gómez.

Antonia Fernández, Supply Chain Planner, lleva más de 13 años  trabajando en Kellogg. Es madre de dos hijos y reconoce que su empresa es un «gran lugar para trabajar».«Me encanta la flexibilidad porque nos permite conciliar la vida laboral y profesional. Tenemos una gran cantidad de ventajas, una oficina extraordinaria o la posibilidad de poder teletrabajar. Estas medidas son fantásticas, porque te permiten ganar en tiempo y en comodidad».

Cambios necesarios

En opinión de los expertos en RRHH hay algunas cosas que deben cambiar en el panorama empresarial español. «Todos podemos contribuir de un modo muy eficaz, dejando de hablar de crisis. No creo que se trate exclusivamente de las empresas o de un colectivo concreto, sino de todos los actores que intervienen en la sociedad. Hay que apostar por aunar esfuerzos y dejar a un lado intereses propios. Desde las empresas habría que  seguir contratando personal y creando empleo para apoyar la reactivación de la economía y el consumo», señala Fernando Córdova, director de RRHH de ING Direct.

Enrique Jurado, «coach» profesional, asegura que hay empresas muy jóvenes que están aplicando nuevos paradigmas de gestión y arrasan en sus resultados. «Apple, Starbucks o Google generan nuevos modelos de gestión. Poco a poco, el resto va a seguirles porque no quedan más opciones si quieres seguir vivo. Sin embargo, en España nos cuestan mucho los cambios, nos resistimos, los criticamos», asegura Jurado.