Una de las aspiraciones más universales en los seres humanos es la felicidad. Es asombrosa la cantidad de formas y combinaciones que acepta dentro de su definición. Bienestar, confianza, belleza y, a veces, únicamente ausencia de dolor. Todos ingredientes que contribuyen a generar momentos felices. Hoy no hablaremos de lo difícil que resulta alargar, mantener, sostener esos momentos, en el Día Mundial de la Felicidad queremos orientar sobre cómo contribuir a que se produzcan esos momentos en un contexto laboral. ¿Cómo conseguir la felicidad en el trabajo?

La felicidad en el trabajo es un término demasiado grandilocuente para trasladar al práctico terreno laboral así que puede ser de ayuda desmenuzarlo en técnicas, procesos, vías o herramientas que puedan proporcionar esos momentos felices desde un departamento de RRHH. Ayudará conocer qué cuestiones favorecen la satisfacción laboral de las personas que forman la plantilla.

Justa remuneración

Está claro que nos levantamos temprano para ir a nuestro puesto de trabajo con el principal objetivo de cobrar un dinero a final de mes con el que pagar facturas, ahorrar para las vacaciones o para la manutención de nosotros mismos y de las personas con las que convivimos. Sentirse bien y justamente remunerado produce satisfacción. También saber que las personas con las que compartimos jornada laboral están remuneradas de una forma justa y equilibrada contribuye a elevar el nivel de satisfacción general. Implantar las políticas salariales de la empresa y garantizar que se está remunerando adecuadamente a cada persona atendiendo a sus circunstancias personales y proporcionando un sistema de ayuda cuando hace falta (como adelanto de nóminas o préstamos). Y, obviamente, sin  que exista ningún tipo de discriminación como puede ser la brecha salarial de género.

Flexibilidad horaria y teletrabajo

La flexibilidad horaria es el concepto más repetido en las encuestas de satisfacción laboral. Poder dejar tranquilamente a los niños en el cole sin prisas, salir y entrar antes durante una temporada para poder hacer un curso, poder esperar al de la caldera porque puedes llegar más tarde o estás teletrabajando. Siempre que se pueda ofrecer la posibilidad de una franja de entrada y otra de salida e implementar herramientas para teletrabajar se estará contribuyendo a generar momentos de felicidad.

¿Cómo se gestiona la felicidad en el trabajo?

Sistema de promoción de carrera

Diseñar carreras profesionales basadas en los logros, con plan estructural de promoción público y transparente que sea conocido por todos los trabajadores. Donde se tenga claro cuál es la manera de ascender con las opciones, itinerarios y objetivos claramente definidos.

Orgullo de pertenencia a través de la RSC

El orgullo de pertenencia a una organización que entiende el contexto en el que opera y es sensible a las necesidades de la sociedad en la que se inserta es también felicidad en el trabajo. La RSC (Responsabilidad Social Corporativa) es un mecanismo de devolución al medio, ya sea social o medioambiental, que las empresas hacen en su área de influencia. En la medida en la que la estrategia de RSC involucra a los empleados éstos se sienten parte de la contribución al bienestar del entorno.

Cultura corporativa

Una cultura corporativa en la que prime la horizontalidad frente a la jerarquía piramidal, donde pocas personas toman decisiones, ayuda a crear un clima laboral que genera confianza (también autoconfianza) y se favorece la implicación del máximo de talento de quienes forman los equipos. Sentirse valorado es un ingrediente de la felicidad.

Comunicación interna

La comunicación es clave en el éxito en cualquier relación, una comunicación que debe fluir en varias direcciones. Construir canales para recoger sugerencias de mejora, como encuestas de satisfacción, y tratar de ponerlas en práctica afianzará los vínculos. Fortalecer los lazos a través de la escucha es practicar la felicidad. Saber comunicar las necesidades de la empresa siendo claros contribuye a la implicación con los objetivos, desde los más inmediatos a los más estratégicos. Definirlos ayuda a intensificar la motivación.

Espacio de trabajo

Se puede aportar al montante de felicidad en la empresa, simplemente, favoreciendo el trabajo en lugares donde se aproveche al máximo la luz solar, que integren decoración y mobiliario ergonómico, plantas, software actualizado, equipos que aseguren un buen rendimiento y  ofrecer servicios de vending o catering. Con buena temperatura en cualquier estación del año. Facilitando la llegada al trabajo en transporte sostenible, con aparcamiento para bicicletas, cerca del transporte público y fomentando un tipo de movilidad que reduzca u optimice el uso del coche, por ejemplo, mediante un sistema de compartir coche.

Relaciones con los compañeros

Las relaciones laborales son complejas y tensas pero también pueden ser desahogo para el estrés. Fomentar el compañerismo, el apoyo y la convivencia durante la jornada laboral ayuda a crear un buen ambiente laboral. Conocer a los compañeros en otras facetas que no se limitan a lo profesional generará buenas relaciones en lo laboral. Pon en práctica el afterwork.

Derecho a la desconexión

Respetar los tiempos de descanso sin que haya injerencias de lo laboral en la vida personal son aspectos cuyos límites son cada vez más difusas y, por tanto, cada vez hay que hacer más esfuerzos porque no influyan. La borrosa línea entre uno y otro mundo en muchos profesionales ha provocado la aprobación de leyes que protegen el derecho a desconecta del trabajo. En la medida en la que la plantilla dispone de tiempo para su autorrealización en otras facetas serán personas más felices y dispuestas tener una mayor implicación.